Fortalecer el comercio electrónico un desafío para el comercio en Latinoamérica y el Caribe

Con la llegada de la pandemia de la Covid-19, el comercio de bienes a nivel mundial registró una caída del 17,7 por ciento


El desafío de los países de Latinoamérica y el Caribe es adaptar el comercio al nuevo contexto de pandemia sin restricciones, con el debido cumplimento de las normativas y manteniendo la inocuidad de las mercancías, según Joe Henry Thompson, especialista en el área de derecho aduanero.

Desde el año pasado, la crisis sanitaria vino a cambiar la manera en cómo se hacía negocios y cómo se compraba debido a las restricciones y al confinamiento.

Con la llegada de la pandemia de la Covid-19, el comercio de bienes a nivel mundial registró una caída del 17,7 por ciento en los primeros cinco meses del 2020 con respecto al mismo periodo de 2019, la mayor contracción desde la Segunda Guerra Mundial y siendo Latinoamérica y el Caribe la región más afectada, según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

En esta nueva realidad, se debe procurar según el especialista, la libre circulación de la mercancía “pero basado en garantizar la salud humana, pero que este no sea un obstáculo técnico al comercio. Ese es el llamado que nos siguen haciendo todas las organizaciones internacionales y es a lo que viene apostando la Organización Mundial de Comercio con mucha atención”.

De acuerdo a Thompson, la convergencia de la empresa privada, autoridades locales y regionales, es clave para garantizar en este contexto el funcionamiento de la cadena logística internacional y el cumplimiento normativo regulatorio local e internacional sin afectar el tránsito de las mercancías.

Thompson recomendó “que sólo prevalezca la normatividad” en función de asegurar la “inocuidad, sanidad y garantía del buen comercio lícito para dejar abrir la puerta (las fronteras) y pasar la mercancía”.

Sobre esto el embajador Melvin Redondo, secretario general de la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (Sieca), señaló que los países deben tomar en consideración “hasta que punto una regulación sobre salud puede definitivamente convertirse en un obstáculo, en una barrera del comercio si no está precisamente fundamentada, si no está basada en argumentos científicos, si no se tiene la prueba suficiente y si no hay esa coherencia entre los temas de comercio y en los temas de salud”.

El secretario del Sieca instó a prestar atención en este punto porque las regulaciones que emiten los organismos internacionales se convierten en referentes para la construcción de normatividades a nivel regional.

“La región tiene otro tema que considerar y es el hecho de cómo estas regulaciones de los organismos internacionales y las regulaciones de los organismos locales en los principales mercados de exportación afectan nuestra capacidad de poner productos en el mercado”, sostuvo Redondo.

Fortalecer el comercio electrónico que tomó auge como alternativa para hacer negocios en el contexto de la pandemia, es otro elemento fundamental que deben tomar en cuenta los países indicó Thompson.