Amamantar a tu bebé es más que darle de comer
La lactancia materna es un proceso natural, en el que la madre no solo alimenta al bebé, sino que es un momento que crea lazos afectivos y del que ambos se benefician. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), “la lactancia natural es una forma sin parangón de proporcionar un alimento ideal para el crecimiento y el desarrollo sanos de los lactantes; también es parte integrante del proceso reproductivo, con repercusiones importantes en la salud de las madres”. Rafael Amador, especialista para el desarrollo de la Primera Infancia, destacó que la lactancia es el primer derecho humano y es la primera vacuna que niños y niñas reciben en cuanto nacen, por lo que es importante iniciar la lactancia en la primera hora de vida del infante. “Le estás pasando toda la inmunidad pasiva a través del calostro, que es la sustancia como suero que sale al inicio”, dijo Amador. El especialista destacó que la lactancia va más allá del valor nutricional del bebé, ya que se este momento se considera esencial para el desarrollo del menor. “Ya no vemos la lactancia como una acción nutricional, sino que es el momento en el que se conjugan todas las intervenciones para el pleno desarrollo del bebé en el futuro” resaltó Amador. Te recomendamos: Cargill y Nestlé, dos empresas con prácticas a favor de la lactancia materna Añadió que es en este momento que se crean los vínculos emocionales y, cuando la lactancia se da en un ambiente compartido con el papá del bebé, se desarrolla un entorno de protección que se ha demostrado disminuye la violencia intrafamiliar. “La primera prevención de la violencia en la sociedad se da cuando se da una lactancia compartida y disfrutada en conjunto: mamá, papá, el bebé y el entorno de la familia”, agregó. Con el calostro, se reduce en un 50 por ciento de que el bebé desarrolle un cuadro de diarrea y protege al bebé ante un gran número de bacterias e infecciones.