Fotos Cortesía.

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Emisión de bonos para solventar déficit estatal con resultados negativos

Las emisiones de bonos de papel en dólares y euros han resultado ser un fracaso total para el gobierno de Nicaragua que pretendía oxigenarse con esta medida el impacto de la crisis sociopolítica que ocasionó una caída en las recaudaciones públicas.


A pesar que el gobierno del presidente Daniel Ortega busca las formas de recaudar recursos que den oxígeno al déficit de casi 11 millones de córdobas que sufrió el Presupuesto General de la República de 2019, producto de la crisis sociopolítica, los métodos que ha desarrollado no han dado buenos resultados.

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A finales de octubre de 2018 se implementó el mecanismo de emisión de “Bonos en Papel” para recaudar dinero, pero el informe del primer trimestre de este año del Ministerio de Hacienda y Crédito Público arroja que de los 100 millones de dólares a recaudar, solo se han logrado colocar 1.1 millones de dólares, por lo que la medida resultó ser un fracaso.

Los inversionistas requieren seguridad jurídica para invertir en un país, en Nicaragua carecemos de eso y mientras no se resuelva el actual conflicto sociopolítico, el gobierno no podrá recaudar recursos de esta manera, explicó el diputado Miguel Rosales.

El documento detalla que de los 1.1 millones de dólares, 0.9 millones fueron en concepto de emisiones de Bonos de la República de Nicaragua con una tasa de rendimiento promedio de 9.57 por ciento y tramos de vencimiento entre 776 y 783 días.

Básicamente lo que está afectando en este intento de recaudar recursos es la incertidumbre que existe en el país. Los agentes económicos han calificado mal a Nicaragua, al bajar el año pasado su calificación y ubicarnos en el tramo donde no somos sujetos de créditos de parte de la banca comercial internacional, refirió el economista Welbin Romero.

El primer monto de bonos emitidos fue de 9 millones de dólares, luego se anunció otro, pero por la cantidad de 60 millones de euros y luego en la reforma tributaria se planteó emitir bonos a las empresas por elevar el pago anticipado del impuesto sobre la renta sin obtener también resultados positivos.