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PIB de Nicaragua crecerá un 3,3% en 2021, según The Economist Intelligence Unit

Estos son los pronósticos que hace la firma británica para el país.


El más reciente reporte sobre la economía nicaragüense de la revista The Economist Intelligence Unit destaca que el producto interno bruto (PIB) del país tendrá un crecimiento del 3.3%, el cual se verá obstaculizado por las infecciones de la Covid-19, la falta de crédito al sector privado y la inestabilidad política derivada del proceso electoral.

“El consumo privado se verá reforzado por una fuerte entradas de remesas de trabajadores del exterior. Exportaciones de bienes, particularmente en la zona franca, también recuperará algo de dinamismo a medida que repunte la demanda de Estados Unidos. Sin embargo, el repunte en 2021 proviene de una base de comparación baja y, por lo tanto, no es indicativo de una mejora sustancial”, señala el informe.

Según The Economist Intelligence Unit, varios factores indican que las perspectivas de crecimiento a corto plazo siguen a la baja, entre ellos el manejo de la pandemia.

En cuanto a las perspectivas de mediano plazo de Nicaragua “se verán empañadas por la preocupación de los inversionistas y la falta de confianza en el estado de derecho. Como tal, esperamos que el crecimiento del PIB real promedio sea solo del 1.9% en 2022-2025. A esta tasa de crecimiento, el PIB real no volverá a su pico de 2017 hasta en 2025”, expresa el documento.

Para el economista Maykell Marenco este porcentaje es muy optimista tomando el contexto político tenso que atraviesa el país.

“En la medida en que se tengan bases de lo que está ocasionando el actual ambiente político tendríamos proyecciones más reales, un simple análisis sería un crecimiento de 2%, en el mejor de los casos, los flujos de inversiones extranjera directa marcaron números bajos por 182 millones de dólares, por debajo de los U$900 millones obtenidos en años anteriores, el sector financiero también es otra variante que depende de la situación del país”, dijo Marenco.

De acuerdo al economista Luis Murillo, de mantenerse el contexto político actual previo a las elecciones presidenciales las proyecciones podrían ser menores, a su juicio se culminará el año con un crecimiento del 0.5%, inferior al pronóstico del Banco Central de Nicaragua que espera lograr crecer entre 2.5 y 3.5%.

“El factor más importante por tratar es el político, mientras no se resuelva el tema de la confianza en el sistema económico entonces no mejoraremos, además en el mediano y largo plazo se debe cambiar la estructura productiva, establecer un sistema bancario especializado que dé financiamiento a la producción, elevar niveles de escolaridad de la población, entre otras”, manifestó Murillo.

La Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides), espera que el PIB nicaragüense este año alcance un 3.7%, por su parte los organismos internacionales son menos optimistas, el Banco Mundial prevé que será de 0.9%, el Fondo Monetario Internacional de 0.2% y la Cepal de 1.3%.