Sancionan a tres funcionarios nicaragüenses bajo la Ley Magnitsky

Esta sanción se traduce en la congelación de sus activos y bienes que tengan en dicha nación norteamericana.


El Director de la Policía Nacional, Francisco Díaz, el tesorero del FSLN, Francisco López Centeno, y el secretario de la Alcaldía de Managua, Fidel Moreno, fueron sancionados por la Ley Magnitsky del Gobierno de los Estados Unidos al estar vinculados por corrupción y violación a los derechos humanos en el país.

Esta sanción se traduce en la congelación de sus activos y bienes que tengan en dicha nación norteamericana.

El ex presidente del Consejo Supremo Electoral, Roberto Rivas, fue el primer funcionario nicaragüense en ser sancionado bajo esta ley.

Sanciones

¿Por qué se les sanciona?

Según un comunicado publicado en la página web del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, al comisionado general Francisco Díaz se le sanciona por ordenar y hacer partícipes a efectivos de la policía “en graves abusos contra los derechos humanos contra el pueblo de Nicaragua, incluidas las ejecuciones extrajudiciales”.

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“La policía nicaragüense se ha acercado a los líderes de las pandillas en Nicaragua para que los ayuden a atacar a los manifestantes antigubernamentales y han sido acusados de disparar indiscriminadamente y matar a manifestantes pacíficos”.

Por su parte, a Fidel Moreno se le acusa de estar estrechamente vinculado con el actuar de la Juventud Sandinista, quienes en diversas ocasiones han violentado la seguridad de los ciudadanos del país.

“La Juventud Sandinista ha sido implicada en numerosos abusos graves contra los derechos humanos relacionados con las protestas en curso contra el gobierno nicaragüense, incluidos los golpizas de los manifestantes en abril de 2018”, refiere la misiva del Departamento del Tesoro.

Finalmente, a Francisco López, quien también es el vicepresidente de Albanisa, se le atribuye la tenencia de “grandes cantidades de fondos recaudados por el gobierno en forma de impuestos y multas que podría explotar, incluso para el uso personal de los líderes nicaragüenses”.

“Altos funcionarios del gobierno nicaragüense y del FSLN han utilizado los fondos de ALBANISA para comprar estaciones de televisión y radio, hoteles, ranchos ganaderos, plantas de generación eléctrica y laboratorios farmacéuticos”, señala el documento.