Foto Cortesía

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Feconori pide prioridad para personas sordociegas en vacunación contra la Covid-19

Muchas de las personas sordociegas no pueden cumplir con el distanciamiento social para prevenir la Covid-19.


La Federación Nicaragüense de Asociaciones de Personas con Discapacidad (Feconori) ha insistido a las autoridades de Gobierno que se incluya a los sordociegos dentro de los grupos prioritarios para acceder a la vacuna contra la Covid-19 sin importad la edad por estar en una condición altamente vulnerable.

Esta recomendación fue dada a vísperas de que se conmemore el Día Internacional de las Personas Sordociegas este 27 de junio.

David Lopez, presidente de Feconori, explicó que muchas de las personas sordociegas, debido a esta discapacidad, no pueden cumplir con el distanciamiento social para prevenir la Covid-19 ya que necesitan del apoyo o la guía de otros para poder trasladarse de un lugar a otro y para poder comunicarse a través de lenguaje de señas que son interpretadas con el contacto a través de las manos.

“En el caso de las personas sordociegas que no pueden guardar distancia física del todo, la aplicación de la vacuna debería ser una prioridad. Lo ideal sería que independientemente de la edad la persona sordociega estuviese en primera línea de vacunación”, recomendó.

De acuerdo a Feconori, en Nicaragua el Ministerio de Salud (Minsa) registra al menos 3,200 personas sordociegas, población que continuará bajo alto riesgo mientras no se acelere su inclusión dentro del plan de vacunación, señaló López.

“Aspiramos (a que los sordociegos se vacunen pronto) porque ya lo hemos planteado (al gobierno) pero todavía no se ha dado una respuesta positiva a esta inquietud”, lamentó.

Debido a esta situación de riesgo, otro reto que tienen a las autoridades según Feconori es adaptar los mensajes de su campaña de prevención de covid-19 a las formas de comunicación que utilizan las personas con discapacidad, desde el lenguaje de señas, mensajes en audio, braille, imágenes, entre otros.

“Todavía no se ha hecho un esfuerzo, más que el que realiza la Asociación de Sordociegos de Nicaragua, pero frente a 3,200 personas sordociegas, la Asociación apenas tiene aglutinadas a 120 personas que presentan sordoceguera y hacia esas 120 personas la Asociación sí ha hecho una campaña directa de prevención, pero a nivel general no”, dijo.

Al respecto, la salubrista Marieliz Rodríguez subrayó que es importante que en toda campaña de prevención se tomen en cuenta que ésta “sea con un diseño universal, que el mensaje le llegue a todos, no pensar que es para las personas con deficiencia visual o deficiencia auditiva, sino que si elaboramos un mensaje, tratar que ese mensaje tenga un diseño para todos, o sea que ya lleve todas las adecuaciones que se necesitan”.