Estudiantes de la UNAN-Managua negociaban salida pacífica cuando fueron atacados

Según el comunicado de los estudiantes, la directiva de los jóvenes atrincherados se encontraba reunida para iniciar el proceso de negociación rumbo a su salida del recinto


Tras el ataque que sufrieron más de 100 estudiantes atrincherados en la UNAN-Managua, representantes ofrecieron una conferencia de prensa en los predios de la Catedral de Managua, para hablar sobre lo sucedido y aclarar que el ataque se dio mientras se negociaba su salida pacífica de este lugar.

Según el comunicado de los estudiantes, la directiva de los jóvenes atrincherados se encontraba reunida para iniciar el proceso de negociación rumbo a su salida del recinto y habían enviado una carta a la Conferencia Episcopal para comenzar la gestión con la Comisión de Verificación y Seguridad del Diálogo Nacional.

"A las 1 de la tarde, paramilitares armados con fusiles de guerra atacaron el recinto. El Gobierno nos atacó despiadadamente, a pesar de conocer nuestra disposición de negociar una salida", cita el comunicado, en el que identifican a Gerall José Vásquez y Francisco José Flores como los dos fallecidos en este ataque.

Ellos aseguran que ambos estudiantes fueron asesinados por francotiradores, ya que los dos murieron por disparos certeros en la cabeza.

De acuerdo a los jóvenes, luego de horas de ataque, a las 5:00 p.m. del viernes unos 120 estudiantes abandonaron la universidad.

"Unos 120 jóvenes nos refugiamos en la Iglesia Divina Misericordia. Hombres encapuchados controlaron los accesos al recinto universitario y atacaron la Iglesia donde estábamos regufiados el día de ayer.

Los universitarios manifestaron que fue hasta las 9:23 de la mañana de este sábado que se les permitió la salida del templo religioso, para ser trasladados hacia Catedral, donde aún se mantienen.

Asimismo, denunciaron el secuestro de cuatro estudiantes que se encontraban atrincherados en el centro de estudios y que tras el ataque decidieron regresar a sus casas, pero que a petición de su familia y por cuestiones de seguridad, no estaban autorizados a brindar sus nombres.

"Denunciamos la manipulación de los hechos y la quema y destrucción de la universidad por parte de los paramilitares y Policía, con el objetivo de inculparnos a los estudiantes por los daños ocasionados al recinto", destacaron.

También hicieron un llamado a la comunidad estudiantil a luchar por el respeto a la Autonomía Universitaria y a exigir una mejor calidad educativa en sus recintos.