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Continúan los despidos de médicos en los hospitales públicos de Nicaragua

El 21 de agosto, el doctor Gustavo Morales, como de costumbre se presentó a trabajar al hospital Lenin Fonseca, pero este especialista en gastroenterología y endoscopia digestiva nunca se imaginó que ese día al terminar su jornada recibiría su carta de despido.


Continúan los despidos de médicos en los hospitales públicos del país, esta vez le tocó a un especialista del hospital Lenín Fonseca en Managua.

El 21 de agosto, el doctor Gustavo Morales, como de costumbre se presentó a trabajar al hospital Lenín Fonseca, pero este especialista en gastroenterología y endoscopia digestiva nunca se imaginó que ese día al terminar su jornada recibiría su carta de despido.

“Honestamente tengo que pensar que las causas (del despido) fueron por las marchas a las cuales asistí en apoyo a los colegas médicos, despedidos principalmente en los hospitales de León y en otros hospitales del país. Más allá, además de pensar también de forma directa sobre ciertas actividades que se presentaban en el hospital sobre algunos colegas en algunas áreas, como el caso del área de neurocirugía donde el abuso y las arbitrariedades por los jefes que lo hacían en concordancia con el sindicato de FETSALUD (Federación de Trabajadores de la Salud). Siempre fui directo criticando el abuso de este tipo de situaciones de estas autoridades”, explicó el médico.

El doctor Morales era el segundo especialista en gastroenterología que el Ministerio de Salud (Minsa) tenía a su disposición en Managua en hospitales públicos, ahora sólo cuenta con un especialista contratado en esta rama y está en el hospital Manolo Morales.

Tras su despido, las autoridades del Hospital Lenin Fonseca no le permitieron a Morales llevar su caso ante una comisión de revisión para demostrar si realmente incumplió con las normas establecidas en el hospital o por el Minsa.

El despido arbitrario de este galeno no es el único que se reporta, pues hasta hace unas semanas al menos a 300 médicos les fueron cancelados sus contratos laborales, según explicó Wendy Flores, abogada del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).

Morales asegura que en el hospital donde hasta hace poco laboró por más de 20 años y en el resto de hospitales públicos los trabajadores de la salud viven bajo constante tensión por presiones del gobierno.

“El gremio médico, muchos de ellos tienen temor a expresar realmente lo que sienten, temor a ser despedidos o a que sean tomadas represalias, eso incluye también a médicos residentes donde incluso los obligan, por estar subordinados académicamente a la institución (a las universidades) y al Ministerio de Salud a acudir a actividades políticas partidarias que los hace mantenerse un ambiente de bastante tensión en el gremio médico”, agregó