Fiel a su estilo de resurgir en los últimos episodios, los Nacionales dieron vuelta de manera espectacular al séptimo partido de la Serie Mundial y se terminaron imponiendo por 6x2 a los Astros para ganar su primer anillo de campeonato del béisbol de grandes ligas.

Una Serie Mundial que acabó con todos los pronósticos: Washington logró coronarse sin ganar un solo partido como local, algo que jamás había ocurrido en la historia y hace todavía más heroico el campeonato.

El juego comenzó bien para los Astros atacando temprano al derecho Max Scherzer y tomando ventaja de 2-0 la cual estaba bien protegida por el abridor de Houston Zack Greinke como en sus mejores versiones dominaba a la batería visitante.

Rendon enciende la mecha de la victoria

En el séptimo episodio, Anthony Rendon rompió el dominio de Greinke conectando cuadrangular por el jardín izquierdo que puso la pizarra 2-1, todavía a favor de los Astros era el momento de los Nacionales para tomar el control del partido y lo aprovecharon al máximo con el vuela cercas de Howie Kendrick con uno a bordo para darle la vuelta al partido, todo esto ante el relevo de Houston.

Washington anotaría tres carreras más para dejar la pizarra en la novena entrada 6x2 y de esta forma sacar sin sobresalto la última bateada de los Astros y coronarse en estadio ajeno celebrando el primer título para esta franquicia en su historia.

Strasburg el más valioso

El derecho Stephen Strasburg fue nombrado el jugador más valioso de la serie mundial al ganar dos partidos y ser vital para empatar la serie a tres juegos por bando. Strasburg se encuentra en el mejor momento de su carrera y lo celebra a lo grande con el título de MVP y de campeones de MLB.

Los Nacionales, que en mayo estaban eliminados y nadie daba un centavo por ellos, son una muestra de perseverancia y nunca rendirse; lo demostraron en toda la temporada y el béisbol le otorga su recompensa como los campeones de la Serie Mundial 2019.