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Nicaragua entre los países con economías menos competitivas, según informe

La falta de institucionalidad e independencia de los poderes del Estado, la corrupción y la falta de seguridad jurídica ha abonado a que Nicaragua tenga una de las economías menos competitivas del mundo.


Nicaragua ha retrocedido en competitividad a nivel mundial, superada sólo por Venezuela, país de América Latina que está en el último escaño del informe del Índice Global de Competitividad 2019 que presentó esta semana el Foro Económico Mundial. En ese ranking Nicaragua se ubica en el puesto 109 en la lista de 141 países evaluados por el informe.

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Según el informe Singapur desplazó a Estados Unidos del primer puesto en competitividad y Hong Kong se ubicó en el cuarto lugar.

La falta de institucionalidad e independencia de los poderes del Estado, la corrupción y la falta de seguridad jurídica, las violaciones a los derechos humanos producto de la crisis política que vive el país desde el año pasado han abonado a que Nicaragua tenga una de las economías menos competitivas en el mundo.

Todo esto ha generado una pérdida de la confianza de los inversionistas en el actual sistema, según Guillermo Jacoby de la Asociación de Productores y Exportadores (Apen).

Si vos tenés un millón de dólares y yo te digo invertilos en Nicaragua o invertilos en Costa Rica ¿En dónde lo invertirías? Vos vas a invertir a dónde vos vas a asegurar tus inversiones, Nicaragua no brinda la confianza, para que regresen las inversiones a Nicaragua hay que generar confianza, sostuvo.

Welbin Romero, economista, aseguró que a esto se suma la falta de un sistema eficiente de producción industrial que permita al país exportar productos terminados y no sólo materia prima.

Romero hizo énfasis que como país no estamos en la punta de los procesos productivos de alto valor en todos los rubros, sino que estamos produciendo materias primas, aún cuando produjeramos materias primas podríamos producirlas con alta calidad.

En ganadería por ejemplo, nosotros producimos un tipo de carne que en Europa es considerada casi orgánica y sin realizar ningún esfuerzo para que sea orgánica; con muy pocos esfuerzos nosotros podríamos certificarnos como carne orgánica y entrar en mercado de alto valor, sin embargo no lo hacemos, porque seguimos concibiendo el tema de la competitividad con el tema de salarios y de impuestos, señaló.

El bajo acceso e implementación de tecnologías de la información y comunicación, la poca suscripción al servicio de internet en banda ancha, fija y móvil y la escasa cobertura de este servicio también le restan competitividad al país, según especialistas.