Caída económica de EE.UU. afectará exportaciones y remesas de Nicaragua, afirman especialistas

Estados Unidos es el principal socio comercial de Nicaragua


El sector exportador de Nicaragua, teme que la caída económica que registra Estados Unidos, su principal socio comercial, afecte la demanda de productos nicaragüenses.

Estados Unidos registró en el segundo trimestre de 2020, una contracción a un ritmo anual del 32,9% de su Producto Interno Bruto (PIB), según datos de la Oficina de Análisis Económico del Gobierno (BEA, por sus siglas en inglés).

Según Guillermo Jacoby, presidente de la Asociación de Productores y Exportadores de Nicaragua(APEN), el sector textil y confección podría ser el más golpeado por esta caída económica.

“El consumidor estadounidense debido a la crisis sanitaria generada por el coronavirus y a la alta tasa de desempleo tendrá menor capacidad adquisitiva y por ende consumirá menos. El impacto se reflejará en las menos órdenes de exportación principalmente en prendas de vestir”, afirmó el presidente de APEN.

De enero a junio Nicaragua acumuló 1,580.27 millones de dólares en concepto de exportaciones de productos primarios, mientras que el régimen de zonas francas alcanzó los 526.2 millones de dólares, representando una caída de 23%, en comparación a la misma fecha de 2019.

Organismos internacionales han señalado que la caída económica del mercado estadounidense se debió principalmente a las medidas de confinamiento que implementó el presidente Donald Trump, durante los meses de marzo y abril, seguido de la lenta reapertura de las actividades económicas entre los meses de mayo y junio.
Según el economista José Vélez, esta caída económica afectará también las remesas.

“La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) pronostica que la caída de las remesas en Nicaragua durante el año será de un 20% a causa de los efectos generados por el coronavirus", resaltó el economista.

Vélez aseguró también que la contracción económica que presentan países centroamericanos provocarán un impacto negativo en los envíos de remesas.