El “Sabor Cubano”, el emprendimiento que conquista el paladar de los capitalinos

Una pareja de cubanos llegó a Nicaragua a emprender a través de la comida rápida.


Yuneimy Perdomo y su esposo Héctor Luis Pardo, originarios de Cuba y casados hace 20 años, aprovechando el libre visado entre ambos países, llegaron a Nicaragua hace casi 30 días, para establecerse y emprender en un negocio al que le han puesto mucho corazón y sazón para conquistar el paladar de los nicaragüenses.

En un carrito de comida rápida han decidido instalarse de los Semáforos de El Colonial, una cuadra abajo, en el que puede encontrar el auténtico “Sabor Cubano”, como han decido nombrar a su negocio ambulante.

Yuneimy contó sus primeros pasos en este país no fueron sencillos, porque su primer intento con un emprendimiento no fue fácil.

“Coincidió nuestra llegada con el día del padre; yo soy artesana por eso me puse a hacer arreglos florales, globos y otras manualidades, desgraciadamente no recuperamos la inversión, hasta los globos salieron volando ese día, pero bueno seguimos adelante”, rememoró.

Los nicaragüenses que les brindaron un techo, en la Colonia Máximo Jerez, en donde tienen que pagar una renta de 180 dólares, les recomendaron emprender en un nuevo negocio y no frustrarse por el fracaso que habían tenido.

“Nos dijeron aquí somos muy comelones, pongan algo de comida cubana que eso va a llamar la atención, la sazón de ustedes es distinta; vimos ese carrito que actualmente no ha sido ni pintado y lo compramos, nos quedamos sin ni un córdoba con esa inversión”, remarcó Perdomo.

El auténtico sabor cubano sale del corazón.

Héctor Luis es el encargado de cocinar, pero afirma no solamente la sazón es esencial en sus platillos, también el amor con el que los ofrecen, porque muchos de ellos son nacidos de las necesidades que tenían en su isla Cuba.

“Lo hacemos como si fuera para nosotros el platillo, se nota el ambiente, el cambio, la calidez con la que recibimos a las personas”, manifiesta Héctor.

Para ellos, Nicaragua representa una oportunidad de mejorar su condición vida, pues a diferencia de Cuba, aquí tienen a la mano los insumos y la materia prima que necesitan para impulsar su negocio.

“En Cuba estuvimos en carnavales vendíamos lo que era Pan con Minuta de pescado, Calentico y teníamos un punto también de flores, teníamos puntos de artesanías en tienda, pero lo que es la materia prima estaba complicada de conseguir, el aceite, harina, el huevo, nada de eso se consigue tan rápido”, refirió Perdomo.

Su menú demuestra el ingenio en cada platillo.

Los altibajos que se han encontrado en el camino no han detenido el deseo de superación de esta pareja. En su menú ofrecen las llamadas frituras, elaboradas solo con huevo y harina, las que se hicieron populares en Cuba como una comida alternativa más accesible producto de la crisis alimentaria y económica que se vive en la isla, pero en Nicaragua la receta será mejorada.

Según Héctor Luis que pone el arte culinario en este emprendimiento próximamente a este platillo le agregarán queso y jamón, para establecer una nueva combinación entre el sabor cubano y el nicaragüense.

“Tenemos bistec lo rebanamos y le echamos la sazón con sabor a cubano, con un poco de ajo y otras especies que le dan un sabor único; también tenemos el Hot Dogs al estilo cubano, casi siempre se busca el pan, pero nosotros lo estamos ofertando simplemente con brochetas son unos palillos, los empanizamos y ha tenido buena demanda por acá; tenemos también Espiropapas, que son papas en espiral”, expresó.

Pero la gastronomía la piensan extender, porque próximamente ofertarán Pescado con Minuta y Calentico, además su deseo es poder ofrecer incluso bebidas para los comensales que decidan detener su marcha en el sector y degustar los platillos.

No se quedan solamente en el carrito.

Aunque no tienen hijos, dejar a su madre, sobrinos y hermanos en Cuba no fue sencillo para esta pareja, por ello su deseo es poder reencontrarse con ellos en Nicaragua.

“Todos los días muy de mañana nos llaman y nos dicen que como nos está yendo, que, si ya vamos para el trabajo, nos dan ánimos; no ha sido fácil”, señala Perdomo con los ojos sollozando al tocarle esa temática.

Regularizar su situación migratoria hasta de ser posible buscar la nacionalidad y posterior no solamente ofrecer sus platillos en el carrito, más bien colocar un local físico, es el deseo a futuro de esta familia de cubanos.

➤ Suscríbete a nuestro canal de YouTube