
Cortesía
Dos mujeres que inspiran a través de su talento
Una se dedica a embellecer las uñas y la otra al cuidado de la piel a través de jabones naturales y esencias.
En el mundo del emprendimiento, cada historia es única, pero hay algo en común entre estas dos mujeres y es que decidieron abrirse camino con sus propias ideas, sacándole provecho a la pasión por lo que hacen.
Alexandra Blass y Sonia Mejía son dos mujeres que han convertido su talento en negocios auténticos, ganándose el reconocimiento de sus comunidades a través del esfuerzo, la creatividad y un serio compromiso con la calidad.
Blass es propietaria de Vanité Nails. Asegura que descubrió su amor por este arte, a los 19 años, cuando estaba en la universidad y cursaba la carrera de inglés para la enseñanza. Desde ese momento ninguna dificultad la ha detenido para tener hoy, el negocio que una vez proyectó en sus sueños.
Al cuidado de la piel
Sonia Mejía, a sus 53 años, decidió ir por sus sueños, luego de afrontar distintos procesos en su vida con mayor conocimiento y madurez.
Asegura que estas experiencias adquiridas han sido aliados para llevar a cabo su proyecto Nasabi, que es un emprendimiento que se centra en la elaboración de jabones orgánicos y se convierten en “spas naturales” esencias, desodorantes, infusiones y aceites para el cuidado de la piel y la salud.
Alexandra se especializa en uñas esculpidas, en distintos materiales como acrílico, polygel, soft gel, entre otros, además de una variedad de diseños temáticos en una variada paleta de colores para tu preferencia.
Por su parte, Sonia, inspirada por la aromaterapia y la herbolaria tradicional, desarrolló una línea de productos libres de químicos, respetuosos con la piel y amigables con el medio ambiente.
Ambas, representan un nuevo modelo de emprendedoras: mujeres decididas, creativas y comprometidas con su oficio que no solo buscan generar ingresos, sino también aportar bienestar, belleza y autenticidad a sus clientas.
Sus historias inspiran a muchas otras mujeres a apostar por su talento, perder el miedo y así demostrarse así mismas que es posible crecer desde lo pequeño y que habrá éxito haciendo las cosas bien con enfoque y disciplina.