Foto/ Chris Castillo

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Chris Castillo, el youtuber nicaragüense que revive la historia y cultura del país

Este joven ha logrado que la gente quiera conocer Nicaragua a través de sus videos.


En un mundo saturado de contenido efímero, Chris Castillo emerge como una voz fresca y auténtica que no solo entretiene, sino que conecta con la esencia de Nicaragua. A sus 29 años, este joven está transformando las diferentes plataformas digitales, en espacios donde la historia, la música y la cultura cobran vida, conquistando a miles de seguidores que buscan algo más que entretenimiento pasajero.

Originario del barrio Altagracia en Managua, Chris empezó su aventura en las redes sociales en enero de 2023, casi por casualidad.

“Comencé como un pasatiempo para desconectarme del estrés del trabajo. La creación audiovisual me permitió encontrar un camino para escapar de la rutina y, de paso, compartir algo que me apasiona”, cuenta.

Foto/ Chris Castillo

Pero lo que parecía un simple hobby se convirtió en una misión: usar el poder de las plataformas digitales para rescatar y difundir la riqueza cultural e histórica de Nicaragua, un país que, “tiene mucho que ofrecer, no solo en paisajes, sino en sus historias y su gente maravillosa”.

@chriscastillo59

EL enigma del duque francés JORGE CHOISEUL-PRASLIN que en encontró refugió en Nicaragua CHARLES THEOBALD CHOISEUL-PRASLIN ♬ sonido original - Chris Castillo

Chris no es el típico creador de contenido. Sus videos y podcasts no solo muestran lugares turísticos o escenas cotidianas. Él recorre sitios emblemáticos para contar su historia desde adentro, acompañándose de personajes locales y expertos que aportan vida y autenticidad a cada relato.

Por ejemplo, relata con emoción sus encuentros con Eddy Kuhl, fundador de Selva Negra, un proyecto que representa el valor cultural y ambiental del país. También ha entrevistado a figuras como Silvio Saballos, tetracampeon de motocross, y músicos locales, acercando a su audiencia a personajes que marcan generaciones.

“El público tiene hambre de saber qué pasó con aquellos que en algún momento nos llenaron de gloria: boxeadores, músicos, deportistas. Mi objetivo es darles voz y visibilidad”, dice.

Además, su pasión por la música, herencia de su experiencia como miembro de una banda de rock, le ha permitido crear podcasts y canciones que acompañan su contenido, ofreciendo una experiencia cultural integral y original.

Crecimiento

En menos de dos años, Chris ha acumulado más de 53,000 seguidores en TikTok, cerca de 31,000 en Facebook y más de 5,500 suscriptores en YouTube, cifras que siguen en aumento. Pero para él, esos números solo son un reflejo del impacto real: la conexión con su audiencia y la inspiración que logra generar.

“Lo más bonito es cuando alguien me dice que vio un video mío y decidió visitar un lugar histórico en Nicaragua, o que aprendió algo nuevo sobre nuestra cultura. Eso es lo que realmente me motiva”, confiesa.

Reconociendo el talento local

Chris también destaca la importancia de la comunidad de creadores en Nicaragua. Menciona a colegas como la doctora Iseth Medina, que crea contenido cultural sobre León, y a Eric y Mateo, un dúo padre e hijo que produce material con enfoque en las tradiciones y la cultura local.

Foto/ Chris Castillo

“No somos competencia, somos parte de un movimiento que busca valorar lo nuestro y compartirlo con el mundo. El público es el que decide, y sin su apoyo no somos nada”, comenta con humildad y claridad.


En un país donde a veces la historia y la cultura quedan relegadas, Chris Castillo emerge como un embajador digital que inspira a las nuevas generaciones a mirar hacia su pasado para construir un futuro con raíces firmes.

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EL TERREMOTO DE MANAGUA DE 1931 31 de Marzo de 1931 Managua , Nicaragua Chris Castillo ♬ sonido original - Chris Castillo

Su historia es un ejemplo de cómo la tecnología puede ser una herramienta para el autodescubrimiento y la reivindicación cultural, y cómo un joven común puede convertirse en una voz relevante, auténtica y necesaria.

“Primero tienes que saber qué te gusta, qué quieres compartir. Y si logras eso, el público vendrá. Este es un camino de autodescubrimiento, y yo sigo aprendiendo cada día”, concluye.