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Cine flotante deslumbra a Manhattan
La programación es variada, desde clásicos y estrenos hasta ciclos temáticos que buscan atraer a públicos de todas las edades.
El verano en Nueva York tiene un atractivo que deslumbra tanto a residentes como a turistas: el cine flotante sobre el río Hudson. Cada noche, plataformas especialmente acondicionadas se convierten en salas al aire libre que combinan películas con las impactantes vistas del perfil de Manhattan.
La propuesta, que ha ganado popularidad en los últimos años, ofrece una experiencia que va más allá de la proyección cinematográfica.
Familias, grupos de amigos y visitantes disfrutan no solo de una película, sino también de la puesta de sol sobre el río, la brisa fresca y el reflejo de los rascacielos iluminados en el agua.
La logística incluye pantallas de gran formato, sonido de alta fidelidad y áreas de picnic, lo que transforma cada función en una velada completa.
La programación es variada: desde clásicos y estrenos hasta ciclos temáticos que buscan atraer a públicos de todas las edades.
Además de su impacto cultural y turístico, el cine flotante ha dinamizado la ribera del Hudson, impulsando la actividad comercial en la zona. Con estrictas medidas de seguridad y accesos regulados, se ha consolidado como una de las actividades imprescindibles del verano neoyorquino.
