De blusa roja, hermana de Ricardo Baltodano, a su lado la esposa del pastor Maldonado.

De blusa roja, hermana de Ricardo Baltodano, a su lado la esposa del pastor Maldonado.

CPDH denuncia estado deplorable de salud de ancianos presos políticos

Julio Montenegro, abogado de la CPDH, advirtió que "el gobierno tienen que tomar medidas inmediatas" para garantizar la salud de todos los presos políticos.


Familiares de presos políticos adultos mayores denunciaron ante la Comisióm Permanente de Derechos Humanos (CPDH) el mal estado de salud en que se encuentran, entre ellos Ramón Maldonado, de 64 años y Ricardo Baltodano, de 58 años.

Según Julia Bermúdez, esposa de Ramón Maldonado, su esposo, un pastor evangélico de 64 años, sufre de diabetes, neuropatía y emocionalmente se encuentra afectado. Su único delito fue ir a predicar a los jóvenes en los tranques y orar por la situación de Nicaragua.

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"La última visita que tuve con él me dijo que tenía hongos en sus pies y sabemos que eso es peligroso para un diabético. Nos preocupa su estado de salud porque lo miramos una vez o dos veces al mes y después no volvemos a saber nada de él, porque no dan razón de su estado de salud en el Sistema Penitenciario", dijo Julia Bermúdez, esposa del detenido.

El pastor Maldonado y miembro retirado del Ejército tiene 8 meses de haber sido detenido y, según su esposa, tiene una condena de 34 años por supuesto terrorismo, a pesar de no haberse probado nada en el juicio.

Otros casos

La hermana del preso político Ricardo Baltodano, Amparo Baltodano, también aseguró que se encuentra muy mal de salud, pues padece de artritis y tiene serias afectaciones en su sistema urológico, por lo que urge atención médica y ser puesto en libertad.

"La preocupación como familia es que realmente a Ricardo lo encontramos francamente desmejorado (...) En el caso de mi hermano es un hombre de 58 años que a pesar de su edad él tiene muchas enfermedades crónicas, tiene hipertensión y ustedes saben que la hipertensión con el calor es una bomba de tiempo, no avisa y creo que esa es una de las preocupaciones para todos", dijo la hermana de Baltodano.

Julio Montenegro, abogado de la CPDH, afirmó que como defensores de derechos humanos han insistido que el encierro y estrés carcelario más las enfermedades crónicas de los presos pone en condiciones difíciles y en limitación la salud de los presos.

"Aparte de la mala alimentación, de un lugar extremadamente caluroso donde no hay circulación de aire; tenemos el caso de personas a las que están sobre medicando, personas que tienen enfermedades crónicas y cuyas edades van más allá de los 60 años. Qué es lo que se puede esperar ahí, un enlace fatal gravoso en perjuicio de la integridad física y humana de la personas", expresó el abogado la CPDH.