Foto Cortesía

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“El Cachorro” no es reconocido como el primer preso político por el Gobierno de Nicaragua

En 2011, Marvin Vargas tenía 40 años y era el principal líder de veteranos de guerra agrupados en una organización conocida como "Los Cachorros de Sandino”.


Marvin Vargas es uno de los más de 80 presos políticos que el Gobierno de Nicaragua no quiere reconocerlo como tal y lo ha dejado como un reo común, pese a que la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH) y organismos internacionales le reconocen como el primer preso político desde la administración presidencial Ortega-Murillo en 2011.

Hace 8 años, Vargas fundó el primer movimiento de cachorros desmovilizados del Servicio Militar patriótico con el objetivo de pedir beneficios al actual Gobierno de Nicaragua, pero para aplastar su organización fue encarcelado por delitos comunes en un juicio viciado.

“Aunque el movimiento nace hace 8 años, él participó en la administración de Bolaños en otras protestas con el mismo objetivo, luego las protestas pararon, pero en 2011 retornó a las calles por inconformidad de los incumplimientos que estaba dando el Gobierno del presidente Ortega”, recordó Pablo Cuevas.

“La autoridades encabezadas por el presidente Ortega inició un proceso de persecución y de fabricación de delitos y el primero fue el de estafa y que mediante un procedimiento anómalo fue condenado a 5 años, al cumplir los 4, se le excarceló bajo convivencia familiar, pero al conocer que nuevamente su organización iba a surgir, fue revocada la medida y devuelto a la cárcel”, manifestó Cuevas.

Marvin Vargas, alias “el cachorro”, tiene una enfermedad terminal, aparentemente tiene cáncer de próstata, nunca se ha confirmado ya que nunca ha sido revisado con propiedad por un médico especialista en el tema.

El excarcelado Cristian Fajardo lo conoció personalmente en la galería 3-1 del penal La Modelo, de Tipitapa, un módulo de 26 celdas, con pequeños cuartos de dos por tres metros, sin iluminación y con dos pequeñas ventanas de barrotes por donde apenas entra aire.

"Saca sangre en el semen. Él se lo grita a los guardias pero no le creen. Un día echó el semen con sangre en un papel higiénico y se lo mostró a un custodio. Solo así lo llevaron a revisión pero al rato regresó sin que le dijeran nada", relató a un medio digital internacional Fajardo.

La última vez que se vio a Marvin Vargas fuera del penal fue en junio del 2017, durante el juicio montado en su contra por tráfico de drogas, desde entonces ha estado en completo aislamiento.