
Presas políticas / Cortesía
Presas políticas de cárcel La Esperanza suspenden huelga de hambre
Una de las presas políticas fue trasladada al hospital tras sufrir un paro cardíaco
Un grupo de mujeres que se encuentran detenidas en el Sistema Penitenciario de Mujeres, La Esperanza, suspendieron este miércoles una huelga de hambre que habían iniciado días atrás, para demandar que una de sus compañeras de prisión recibiera atención médica.
Según familiares de las presas políticas, quienes fueron detenidas hace un mes cuando intentaban llevar agua a un grupo de madres que también estaban en huelga de hambre en la iglesia San Miguel de Masaya, suspendieron la huelga al lograr que su compañera Neyma Hernández recibiera atención médica.
“Las muchachas decidieron declararse en desobediencia carcelaria para no tomar los alimentos, como una medida de presión para que pudiera atender a Neyma, pero es una medida extrema, eso lo que nos refleja es la negligencia y la indolencia de parte de las autoridades”, aseguró Tamara Zamora, madre de Amaya Coppens, una de las presas políticas.
Ivania Álvarez, Olga Valle, Wendy Juárez, Olama Hurtado y Amaya Coppens, son las presas políticas que estaban en huelga de hambre.
Familiares de las detenidas confirmaron que la presa política Neyma Hernández fue trasladada de La Esperanza al Hospital Roberto Huembés luego de sufrir un paro cardíaco.
Pero el mismo día la presa política fue llevada a las instalaciones de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), mejor conocida como El Chipote.
“Ella fue trasladada a las 5:30 (del martes) de nuevo hacia las celdas de El Chipote, está muy mal, muy delgada, está pálida, me comentaba la mamá que habla pausado y ella no es de hablar así, ella tiene problemas de tiroides y parálisis, pero las autoridades le habrían negado la atención médica”, expresó Marvin Álvarez, hermano de Ivania Álvarez.
Según los familiares de las reas, las autoridades de La Esperanza no permiten el ingreso de una colcha para poder abrigarse ante el “intenso frio” que hace en las lomas donde están ubicadas las celdas, lo cual les ha provocado serios problemas de salud.
“Amaya sigue teniendo problemas de presión y con todo esto lo que sabemos es que el medicamento se lo pasan a veces y otros días no, con la presión no se puede jugar tiene horario que cumplir de tomarse su medicamento y sin embargo no lo están haciendo de manera correcta”, aseguró la mamá de la joven.