Foto Cortesía

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Persiste cultura del silencio como política de comunicación gubernamental, dice FVBCH

Esta cultura del silencio fue notoria durante el mes de noviembre durante la cobertura del paso de los huracanes Eta-Iota por Nicaragua.


La Fundación Violeta Barrios de Chamorro (FVBCH) lamentó que en el mes de noviembre durante la cobertura periodística de los huracanes Iota y Eta los medios de comunicación independientes hayan recibido censura y obstaculización de su labor de parte de las instituciones estatales y la Policía Nacional.

Según el informe de la FVBCH, es “abominable” que a un mes del paso de estos huracanes, el Gobierno ejecute “la cultura del secreto” como política de comunicación estatal, perpetrado en la centralización de la información pública sensible.

El caso concreto más grave y que tipificaron como violación al acceso a la información pública, sucedió el 18 de noviembre en el derrumbe del macizo de Peñas Blancas, en el departamento de Matagalpa, cuando un grupo de periodistas llegaron con la intención de dar cobertura periodística al suceso, pero efectivos de la Policía Nacional sin justificación alguna negaron el acceso.

“Ante la denegación de acceso a la zona del deslave los periodistas refutaron a los uniformados de que solo los medios oficialistas tenían permitido realizar la cobertura, los agentes del orden se limitaron a decir que eran órdenes superiores”, señala el documento.

Incluso en los centros de albergues donde se encontraban personas damnificadas en la Costa Caribe Norte a causa de los huracanes se negó el ingreso a la prensa independiente, aduciendo que solo podían acceder funcionarios del gobierno, un hecho que demuestra, según el informe, que el Gobierno politizó la tragedia.

“Fue una emergencia cuya información pretendieron ocultar y centralizar, cuando era el momento de llevar información oportuna y veraz a través de todos los medios posibles”, cita el documento.

Al menos dos medios de comunicación con enfoque comunitario de distintos departamentos del país realizaron modificaciones en su contenido y línea editorial de sus espacios noticiosos tras visitas directas a sus dueños por parte de efectivos de la Policía Nacional.

En esos espacios informativos, se dejó de hablar de organizaciones de la sociedad civil y ahora solo dan cobertura a sucesos, servicios sociales y noticias internacionales.

En el mes de noviembre, según la FVBCH, hubo 26 casos de violaciones a la libertad de prensa, 9 casos de violación al acceso a la información, 11 agresiones y ataques, 2 detenciones arbitrarias, 2 discursos estigmatizantes y 2 procesos judiciales.

De los 26 casos de violaciones a la libertad de prensa, 24 fueron perpetrados por agentes estatales y 2 en los que no fue posible identificar a los victimarios.