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Joven que atropelló a madre e hijo en Carazo conducía a más de 90 km/h
Familiares de víctimas aseguran que violentó el juramento médico.
En prisión preventiva quedó el estudiante de medicina Joaquín Zamora Rivera, de 23 años de edad, quien es acusado de homicidio imprudente tras haber atropellado a una madre y su hijo de dos años de edad, la noche del pasado 8 de mayo.
El trágico hecho sucedió en la carretera Panamericana Sur, en el kilómetro 49.2, municipio El Rosario, en el departamento de Carazo.
La acusación del Ministerio Público reveló que Zamora Rivera conducía la camioneta marca Toyota gris, placas LE 39184, con la que atropelló y acabó con la vida de Yasmina del Socorro Medrano Cortés, de 36 años, y a su hijo de iniciales G.L.H.M.; de 2 años de edad.
De acuerdo a las investigaciones, al momento del accidente el señalado conducía a 96 kilómetros por hora, cuando en ese tramo de carretera el límite permitido es de 45.
Donald Ruiz, Juez Único Local del municipio El Rosario, realizó la audiencia preliminar en la estación policial de Jinotepe para resguardar la integridad física del acusado, según medios de comunicación locales.
Bernardo Antonio Hernández Mora, esposo de Yasmina y padre del niño, lamenta que el joven, pese a ser estudiante de medicina, no haya mostrado compasión por las víctimas al no asistirlas y huir de la escena.
Por orden del judicial, el joven médico deberá presentarse nuevamente a audiencia inicial el próximo 21 de mayo.
Alcohol en sangre es determinante
El imputado fue capturado un día después de cometer la tragedia, cuando la Policía Nacional encontró la camioneta involucrada en el accidente guardada en un garaje frente al Benemérito Cuerpo de Bomberos de Jinotepe, donde alquilaba, ya que estaba realizando su internado en el Hospital Regional Santiago de Jinotepe.
El abogado criminalista Kenthyn Téllez explica que, aunque es irrelevante la profesión en este caso, la actitud del conductor sería tomada en cuenta como una agravante por haberse dado a la fuga.
“Hemos podido saber por los medios noticiosos, que cuando lo agarraron esta persona andaba tranquila como que no había hecho absolutamente nada, aunque el juramento hipocrático que hacen los médicos dicta que lo hacen para atender a todas las personas que llegan obviamente buscando ayuda, no consideró que sea una agravante, en este caso, la pérdida de vidas humanas, el exceso de velocidad, manejar de forma temeraria y haber huido, dejar a esas personas obviamente tiradas en la carretera”, detalla.
El jurista considera que son claves las investigaciones, puesto que si se confirma que esta persona conducía en estado de ebriedad podría cambiar la tipificación del delito a homicidio a título de dolo eventual.
“Porque tuviste el descaro de que sabiendo que vas tomado agarraste un vehículo, asumiste el riesgo de que podrías colisionar a alguien, porque obviamente tu función cognitiva no es la misma (…) recordemos, sin embargo, que si andabas un litro de alcohol en sangre y te hacen la prueba 24 horas después es probable que ya no haya rastro de dicho alcohol y esta persona fue un día después que lo agarraron, pero tendrán las autoridades que jugársela en las investigaciones”, comenta.
De ser condenado por homicidio imprudente, la pena máxima para el estudiante de medicina sería de 4 años y de ser cambiada la tipificación a homicidio a título de dolo eventual serían 30 años de cárcel.