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Dejar a niños solos podría llevar a los padres a prisión
Especialistas advierten sobre consecuencias legales y psicológicas del abandono infantil.
Una niña de apenas dos años fue hallada sola y encerrada en una habitación en el barrio Jonathan González de Managua. Según el abogado especialista en derecho de familia Pablo Beteta, este tipo de conductas podrían considerarse “abandono agravado” y están penadas con hasta cinco años de prisión, si se demuestra que se puso en riesgo la vida o el bienestar emocional del menor.
El Ministerio de la Familia intervino de inmediato tras la denuncia de los vecinos a través de redes sociales, y asumió la tutela temporal de la menor de edad mientras se investigan los hechos.
La madre, María Eloísa Pérez, conocida como “Chela”, ha sido señalada por dejar en repetidas ocasiones a su hija sin compañía ni alimento.
“El abandono infantil está contemplado en nuestro Código Penal como un delito agravado cuando la víctima es una persona menor de edad. Esta conducta puede ser sancionada con penas de tres a cinco años de cárcel. Además, si se comprueba omisión del deber de cuidado, se suma una pena adicional de seis meses a un año de prisión”, explicó el abogado Beteta.
Asimismo, destacó que el Estado nicaragüense tiene la obligación constitucional de garantizar el desarrollo integral de la niñez.
“Nuestra Constitución, el Código de Familia y la Ley de la Niñez y Adolescencia son claros, todo niño tiene derecho a crecer en un ambiente seguro, con salud, educación y alimentación. Cualquier infracción contra esos derechos puede tener consecuencias penales y administrativas”, indicó el experto legal.
Beteta también recordó que cualquier ciudadano puede reportar este tipo de casos de manera anónima ante el Ministerio de la Familia.
“Es un asunto de orden público. La denuncia puede hacerse en cualquier delegación distrital, y las autoridades están obligadas a actuar bajo el principio del interés superior del niño”, subrayó.
Desde el enfoque psicológico, las secuelas pueden ser igual de graves. Renato Montealegre, psicólogo, advirtió que una experiencia de abandono en los primeros años de vida puede marcar para siempre la salud emocional de un niño.
“En el caso de esta niña, ya existe un impacto emocional profundo. A los dos años, su cerebro está en una etapa crítica de desarrollo, y el abandono puede generar desde ansiedad y depresión hasta trastornos graves de límite de personalidad”, explicó Montealegre.
El especialista aclaró que no basta con separar al menor del entorno peligroso, ya que la recuperación requiere una atención integral.
“No se trata solo de asistencia psicológica. Es necesario incluir a trabajadores sociales y, en casos más complejos, incluso psiquiatras. De nada sirve rescatar a la niña si no se atiende también a la madre”, añadió.