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Proponen crear reglamento para contratar a cadetes de taxi
Esto reduciría cualquier infiltración de delincuentes en el sector selectivo, reconoce una cooperativa.
El Instituto Regulador del Transporte del Municipio de Managua (Irtramma) y el Ministerio de Transporte e Infraestructura (MTI) deben considerar la creación de un reglamento para exigirles a las cooperativas de taxis y dueños de concesiones la contratación de cadetes que no tengan el récord criminal, esto para evitar que se infiltren delincuentes en el sector, coinciden un abogado y el representante de una cooperativa del sector selectivo.
Esta propuesta surge a raíz de la muerte de Norlan Medrano Flores, de 39 años de edad, un cadete de taxi que perdió la vida el pasado fin de semana cuando un guarda de seguridad le propinó un disparo por supuestamente participar de un asalto a una tienda de celulares en Altamira en Managua.
El señalado, llevaba tres días sin reportarse con la dueña del taxi Toyota Yaris que conducía, placa M-02223, el que aparentemente dejó abandonado en la Rotonda La Virgen para cometer el asalto a la tienda.
Extraoficialmente, se conoció que Flores tenía antecedentes por robo contra dos pasajeros en Managua, un delito por el que hace dos años enfrentó un proceso judicial, pero logró salir en libertad porque las víctimas no se presentaron al juicio, según una radioemisora nacional.
Autoridades deben regular
Vidal Almendarez, presidente de la Federación de Cooperativas de Taxis de Nicaragua (Fenicootaxi RL), señaló que las autoridades reguladoras del transporte son las únicas facultadas para crear un reglamento que exija cumplir con requisitos específicos y tratar de evitar la infiltración de delincuentes en el sector.
“A nuestros agremiados les hemos dicho que debemos tener un mecanismo interno de algunos procedimientos mínimos para la contratación de un conductor, pedir el récord de policía, pedir constancia judicial, alguna carta de recomendación dentro de los conductores que tal vez ya sea conocido, porque definitivamente esto afecta la imagen del sector”, reconoce.
Insiste en que las autoridades deberían acompañar esta regularización con la creación de un sistema digital que permita registrar a cada conductor, como ya pasa con los concesionarios, para que en casos de maltrato al pasajero y otras irregularidades queden documentadas.
“Podríamos ir eliminando aquellos malos conductores, que se puedan ir encontrando en el camino, que actúan de manera incorrecta y que definitivamente afecta a los usuarios. Nosotros decíamos que se debe hacer una investigación en cada denuncia y, de encontrar pruebas, manchar el récord de ese conductor y que nadie más lo contrate”, propone Almendarez.
El abogado Domingo Diogo, concuerda en que, urge esta regularización a nivel nacional, pero señala que de forma individual los concesionarios deben establecer sus propios requisitos.
“Actualmente, lo que hay es que algunos dicen: 'llévate el taxi y me vas a traer, por ejemplo, 500 o 600 córdobas diarios y el resto es tuyo, usted se encarga del combustible, aceite y de otros servicios más que requiere el vehículo’, pero (el dueño) no toma en cuenta esa parte de la peligrosidad”, destaca.
Documentos en regla
El abogado también comenta que los documentos tendrían que andar siempre con el conductor y ser presentados en caso de cualquier retención hecha por los inspectores del Irtramma, quienes pueden llamar a las autoridades policiales en caso de detectar algún presunto delincuente infiltrado como taxista.
“Solo el hecho de exigirles el récord de policía ya va a disuadir a los delincuentes, porque si tiene un delito y va a pedirlo, allí nomás lo pueden detener, además que los inspectores que tiene el Irtramma en coordinación con las cooperativas de taxis podrían detener a los taxistas y pedirle los documentos; tienen que andar consigo el récord de policía, la constancia judicial, la licencia y tal vez las cartas de recomendación”, enfatiza.
Según Diogo, si el conductor o cadete comete algún delito dentro del taxi, la responsabilidad penal no es extensiva al dueño del vehículo, únicamente si ocasiona un accidente de tránsito con daños materiales o de muertes.