Foto: El Faro

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Hacinamiento en cárceles de Nicaragua podría haber aumentado desde el inicio de la crisis, según organismos de DD.HH.

Antes de que iniciara el actual conflicto político que vive Nicaragua, se estimaba que entre todos los Sistemas Penitenciarios del país había unos 13 mil privados de libertad que se mantenían bajo régimen carcelario en condiciones infrahumanas


Organizaciones de derechos humanos no descartan que el hacinamiento en las cárceles del Sistema Penitenciario de Nicaragua haya aumentado en estos últimos 4 meses debido a las masivas detenciones arbitrarias que ha emprendido el actual gobierno en contra de civiles que han participado en las manifestaciones cívicas.

Antes de que iniciara el actual conflicto político que vive Nicaragua, se estimaba que entre todos los Sistemas Penitenciarios del país había unos 13 mil privados de libertad que se mantenían bajo régimen carcelario en condiciones infrahumanas, cuando estos centros de reclusión sólo tienen capacidad de albergar entre 6 mil y 7 mil reos como máximo, de acuerdo a Marcos Carmona, presidente de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH).

A esta organización le preocupa que la actual crisis haya deplorado aún más las condiciones en las que se encuentran los privados de libertad.

“Nos han informado personas que están dentro de los sistemas penitenciarios que en lugares que generalmente habían 6 personas hoy hasta 12 o 15 personas durmiendo en el suelo. Incluso en las cárceles de mujeres que se manejaba que era una de las cárceles modelo, que había respeto a los derechos humanos, sabemos que se turnan para estar aprovechando las camas que están en estos centros”, sostuvo Carmona.

El funcionario de la CPDH recordó que Nicaragua es suscriptora de convenios y tratados internacionales sobre la protección de los derechos humanos de los privados de libertad y que las personas que han sido privadas de libertad, si bien pierden el derecho a la libre movilización, no pierden el derecho a tener condiciones adecuadas y a recibir trato humano mientras permanecen dentro del régimen carcelario.

Otro de las preocupaciones que han manifestado distinta organizaciones de derechos humanos tiene que ver con la sospecha de que existan centro de detenciones clandestinos donde podrían estar llevando a los presos políticos.

“Por ejemplo nos han dicho que en el lado de Diriamba ahí hay un centro de detención, nos han dicho que en lado de San Rafael del Sur, incluso nos decían que el antiguo Estadio Nacional, pero no hemos podido conformar, más que sólo la gente que nos ha informado, pero son gente que no ponen una denuncia formal por temor a represalias y temor a que en algún momento se den cuanta (el gobierno) quién es el que está poniendo a denuncia”, añadió.

De acuerdo al informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), “las personas detenidas en el marco de las protestas iniciadas desde el 18 de abril, habrían sido objeto de distintas formas de tratos crueles, inhumanos y degradantes, llegando algunos de los tratos descritos a alcanzar el umbral de tortura, durante el momento de su aprehensión y mientras se encontraban privadas de su libertad”.