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Medidas de prevención contra el dengue en Nicaragua

El reciente reporte del Minsa contabilizó 3,437 casos sospechosos de dengue y 75 casos confirmados en ese periodo.


El Ministerio de Salud (Minsa) en su último reporte epidemiológico que abarcó hasta el 02 de julio registró una disminución del 10% en los casos positivos de dengue, señala que es de suma importancia que la población conserve el abate en los depósitos de agua como medida preventiva.

Se ha implementado una nueva presentación y técnica para el abate, con el objetivo de que este químico tenga una mayor duración en los depósitos de agua y contribuya a prevenir la proliferación de mosquitos transmisores del dengue.

“Ahora el abate lo estamos dejando en una bolsita que tiene unos hoyitos para que pueda salir y queda flotando, pero cuando nosotros hacemos la limpieza de estos recipientes, sacamos la bolsita y la lavamos para descongestionar los hoyitos; semanalmente limpiamos nuestros depósitos, pero dejamos el abate por un mes, porque al mes llega personal médico a abatizar e inspeccionar el patio, los alrededores o cualquier depósito”, dijo la Dra. Martha Reyes, ministra de salud.

Y es que, a pesar de la reducción en el número de casos respecto a la semana anterior, el reciente reporte del Minsa contabilizó 3,437 casos sospechosos de dengue y 75 casos confirmados en ese periodo.

El primer brote importante de dengue en Nicaragua se registró en la década de 1980. Desde entonces, el país ha experimentado múltiples episodios de propagación del virus, con consecuencias significativas para la salud pública y la calidad de vida de la población.

El epidemiólogo Leonel Argüello insta a no bajar la guardia con la prevención sobre todo porque el invierno aumenta el riesgo de contagio para la población.

“El ingreso de invierno al país representa brotes en múltiples enfermedades vectoriales, en este caso la más frecuente es la transmitida por el mosquito Aedes aegypti que puede provocar hasta 5 enfermedades virales a través de la picadura de la hembra que requiere sangre humana para madurar sus huevos, en Nicaragua hemos tenido dengue, chikungunya, zika y esperamos que no entre el mayaro o la fiebre amarilla que son las otras dos enfermedades que provoca el mosquito”, detalló Argüello.

Hasta la semana epidemiológica número 21, el aumento de casos de dengue confirmados en Nicaragua fue del 292% al compararlos con cifras del año 2021, indican los datos del Minsa.

La prevención continua y la concienciación sobre la importancia de eliminar los criaderos de mosquitos siguen siendo fundamentales en la lucha contra el dengue en Nicaragua. Las autoridades sanitarias instan a la población a mantenerse alerta y tomar medidas preventivas para evitar la propagación de esta enfermedad.

El dengue sigue representando un desafío en Nicaragua. La enfermedad puede tener un impacto significativo en la salud de las personas, especialmente en niños y adultos mayores. Además, los brotes de dengue pueden afectar la economía y el desarrollo del país debido a los costos asociados con el tratamiento de la enfermedad y la disminución de la productividad.

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