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Estos son los retos y riesgos de los embarazos múltiples

Las mujeres mayores de 35 años tienen más probabilidades de concebir mellizos.


El embarazo múltiple, una condición poco frecuente, plantea desafíos significativos tanto para la madre como para los bebés. Cuando una mujer gesta más de un hijo, su embarazo se clasifica automáticamente como de alto riesgo, ya que las exigencias físicas y médicas aumentan exponencialmente.

Según el doctor Javier Cantarero, ginecólogo especialista, el embarazo múltiple puede originarse por factores como la herencia genética, la edad materna o tratamientos de fertilidad, pero siempre implica mayores cuidados médicos.

Un embarazo gemelar, que implica dos bebés, ya se considera una excepción a la norma, dado que lo habitual es que cada gestación dé lugar a un solo hijo. A medida que el número de bebés aumenta, también crecen los riesgos de complicaciones, como parto prematuro, preeclampsia, hipertensión gestacional y problemas cardiovasculares en la madre.

“El cuerpo humano está diseñado principalmente para llevar un solo bebé por embarazo, por lo que cualquier variación de esta norma representa un desafío para la salud de la madre y los fetos”, explicó Cantarero.

Los embarazos múltiples pueden producirse de dos maneras principales: por la fertilización de varios óvulos durante la ovulación o por la división de un óvulo fecundado en varios embriones. Aunque la genética juega un papel importante, otros factores, como la edad de la madre, también son determinantes.

Propensas a embarazarse

Las mujeres mayores de 35 años, por ejemplo, tienen una mayor probabilidad de liberar más de un óvulo durante su ciclo ovulatorio, aumentando las posibilidades de concebir mellizos, trillizos o más.

Sin embargo, la edad avanzada también eleva los riesgos. “Después de los 35 años, la calidad de los óvulos disminuye, y con ello, aumentan las probabilidades de complicaciones durante el embarazo”, señaló el especialista.

Estos riesgos incluyen un incremento en la tasa de partos prematuros, bebés con bajo peso al nacer y complicaciones en el desarrollo de los fetos.

Con los avances en la medicina reproductiva, los embarazos múltiples han aumentado debido a tratamientos como la fertilización in vitro y la estimulación ovárica. Estos procedimientos, aunque efectivos, deben ser cuidadosamente supervisados para evitar embarazos de alto orden, que representan un mayor desafío para el cuerpo de la madre y para los especialistas a cargo.

“El embarazo múltiple no es solo un fenómeno biológico interesante, sino también una prueba de los límites del cuerpo humano y la medicina moderna”, afirmó Cantarero. Aunque los embarazos de alto orden pueden parecer milagrosos, también destacan la importancia de la planificación familiar, la atención médica adecuada y el acceso a recursos médicos especializados para garantizar la salud de la madre y los bebés.

En cualquier caso, el embarazo múltiple continúa siendo una condición que genera asombro y admiración, pero también muestra la necesidad de tomar decisiones informadas sobre la maternidad, especialmente en edades avanzadas o bajo condiciones médicas específicas.