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Minsa insiste en ordenamiento de clínicas de medicina natural y terapias complementarias
Actualmente, la institución cuenta con más de 300 clínicas de este tipo en todo el país.
El Ministerio de Salud (Minsa) reiteró la importancia del proceso de ordenamiento de las clínicas de medicina natural y terapias complementarias en Nicaragua, como parte de una estrategia para garantizar la calidad y seguridad de la atención en este sector.
La ministra de salud, Ofelia Villalobos, recordó que el Minsa, recientemente emitió una resolución que establece los lineamientos para regular el funcionamiento de estas clínicas y las prácticas que en ellas se realizan.
Esta medida busca asegurar que la medicina natural, una práctica ancestral y parte del patrimonio cultural, sea aplicada de forma responsable, higiénica y respaldada técnicamente.
“El objetivo es que estas clínicas, consultorios y laboratorios que fabrican o distribuyen productos naturales, estén debidamente regulados, certificados y cumplan con las normas sanitarias” expresó.
También enfatizó que todo producto, ya sea natural o químico, debe tener registro sanitario, fecha de vencimiento y condiciones adecuadas de elaboración.
Actualmente, el Minsa cuenta con más de 300 clínicas de medicina natural y terapias complementarias a nivel nacional.
Estas clínicas ofrecen servicios que van desde la fitoterapia, uso terapéutico de plantas, hasta la atención emocional y las terapias físicas de rehabilitación.
Requisitos dependerán del tipo de establecimiento
Sobre los requisitos, la funcionaria, apuntó que, el ordenamiento incluye documentación diferenciada según el tipo de establecimiento, ya sea una herbolaria, clínica, farmacia natural o laboratorio de manufactura y contempla que los practicantes estén debidamente certificados.
“Pueden ser profesionales de la salud o personas con conocimientos tradicionales, siempre y cuando estén avalados por el Minsa”, agregó.
La institución instó a la población a verificar el cumplimiento de estos requisitos antes de consumir productos naturales o recibir terapias, especialmente en mercados y espacios informales donde estas prácticas son comunes.