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Oportunidades laborales en Nicaragua se acortan para jóvenes bilingües

El inglés es considerado como una de las herramientas necesarias para conseguir mejores oportunidades e ingresos económicos; sin embargo, la crisis también ha pasado la cuenta para quienes lo hablan.


Los call centers, desde que iniciaron operaciones en nuestro país después del 2010, se habían convertido en una gran oportunidad laboral para muchos jóvenes, que por falta de oportunidades, no habían podido conseguir un empleo en su profesión. Ahora, por la crisis económica, esa oportunidad podría estar en peligro.

Muchos jóvenes han sido afectados por la actual situación que atraviesa el país, quienes han sido parte de los recortes de personal en las diversas empresas. Esto fue lo que le sucedió a Danny Argüello, quien fue despedido de un call center por cierre de operaciones.

"Tengo una semana de estar desempleado por motivos que la compañía cerró. Yo no fui despedido porque hice algo malo, sino que la compañía por la situación (del país) llegó a cerrar y la mandó a otro país" narró Argüello.

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Este sector venía en crecimiento. Solo en el 2016 generó unos 8,900 empleos según cifras de la gubernamental Pro Nicaragua, y se habían asentado en el país unas 45 empresas que exportan diversos servicios a Estados Unidos, Europa y América Latina.

"Nicaragua ha entrado con esta crisis en una etapa de peligro para negocios, para inversiones, para establidad laboral, y creo que el cierre de un call center es un aviso de lo que podría ser la tendencia de otro grupo de empresas de este tipo de servicios, porque no hay estabilidad en el país" manifestó el sociólogo Cirilo Otero.

Según el especialista, "hay 3 implicaciones,: la primera (es) económica porque el país pierde esas inversiones; (la segunda) a los jóvenes los frustra y además que son consumidores y aportan a la economía; y la tercera es la pérdida, es la falta de credibilidad y confianza en el país".

El inglés es considerado como una de las herramientas necesarias para conseguir mejores oportunidades e ingresos económicos, sin embargo la crisis también ha pasado la cuenta para quienes lo hablan.