Lorenzo Vega Sánchez / VOS TV

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Una década enamorando a sus clientes con la sopa de queso

La sazón la heredó de una extrabajadora que le enseñó el secreto de la receta.


Salvadora Arias tiene 10 años de elaborar la tradicional sopa de queso los Miércoles de Ceniza, lo hace en su comedor ubicado en el Mercado Iván Montenegro de Managua. Aunque son 30 años de trabajo como comerciante de alimentos preparados, cuenta que preparar este platillo se le complicaba, hasta que una trabajadora le compartió el secreto de su receta.

“Antes tenía un comedor en otro lado y una muchacha que trabajaba conmigo sabía hacer la sopa, viera como se me llenaba allí, entonces para la Cuaresma y Semana Santa era fija esta sopa, poco a poco me fue instruyendo”, contó.

La comerciante reconoce que cada vez menos nicaragüenses se animan a elaborar estos platillos, por lo costosos que se han vuelto, pero en su caso las sopas de todo tipo son la especialidad de su cuchara, una sazón que le genera mucha demanda.

“De cualquier tipo de sopa ya puedo hacer, mariscos y costilla alta se venden en esta temporada, hace poco entregué más de 100 tasas en el Bertha Calderón para los pacientes; en fin, yo le digo a mis clientes cuando vienen, que van a volver, quien prueba mi comida vuelve”, aseguró Arias, seguida de una carcajada, mientras servía una sopa especial.

Menor demanda y mayores costos de elaboración

La comerciante reconoce que esta vez decidió preparar la sopa en un perol más pequeño en comparación al año pasado, aduciendo temor de no poder venderla ante las bajas en las ventas que experimenta esta semana.

“Solo hice como 12 tasas de sopa; el año pasado si serví más, pero es que la demanda este año está más baja”, añadió Salvadora, cuando le quedaban solamente 5 tasas para terminar la venta sopa de queso.

A pesar de ser más pequeño el perol de este año, Arias invirtió 300 córdobas en queso, siendo “la inversión histórica para este platillo”, por ello tuvo que aumentar el precio por tasas a 120 córdobas, cuando el año pasado se cotizaba a 100.

Lorena Baltodano, otra comerciante del lugar, rememoró que el año pasado la libra de queso al por mayor le costó 40 córdobas, pero este año tuvo que pagar 74 córdobas.

“A pesar del costo de elaboración, la tasa la tenemos a 100 córdobas, además lo compensamos con otros platillos de Cuaresma, tenemos pescado frito y chuletas a 120 y 200 córdobas en dependencia del plato”,

Baltodano ofrecerá durante las próximas semanas los platillos de la temporada, agregándole el Pinol de Iguana, que costará 120 córdobas.

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