Foto Cortesía.

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Esto es lo que representa para los nicaragüenses la partida al Vaticano de Monseñor Báez

Monseñor Báez pidió a los nicaragüenses seguir luchando por la paz y justicia que se merece la nación y sus ciudadanos.


Los aliados, actores políticos y simpatizantes del Partido de Gobierno de Nicaragua, el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), no deben ver como una victoria el retiro de Monseñor Silvio Báez a Roma a petición del Papa Francisco, así lo asegura el analista político Edgar Parrales, quien afirmó que ahora el obispo auxiliar más bien tendrá mayor protección y espacio mundial para denunciar los abusos y violación de derechos humanos que son cometidos en el país.

"Si acaso el Papa Francisco hizo caso a la presión del Estado, ni así se considera una victoria, porque allá estará libre de toda presión y podrá denunciar libremente al Gobierno de Nicaragua y hasta se dará a conocer como una voz fuerte del país y conseguir apoyo de varios países europeos que se han mantenido alejados de este conflicto en Nicaragua", sostuvo Parrales.

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Para el analista político Bosco Matamoros, la distancia de Monseñor Báez en relación con Nicaragua no será impedimento para que siga denunciando los abusos del Gobierno de Nicaragua en contra de los nicaragüenses y pedirá propuestas de soluciones para lo que vive el país.

"El Vaticano, que se ubica en Roma, es una voz colegiada y con gran presión moral para reprender la violencia en todo el mundo y eso se va a acrecentar con la presencia de Báez allá", mencionó Matamoros.

En su última misa en la Parroquia Santo Cristo de Esquipulas, monseñor Báez pidió a los nicaragüenses que nadie les quite la esperanza ni les haga caer en violencia, en referencia a la actual situación que se vive en Nicaragua, en donde el Gobierno no permite a los ciudadanos manifestarse libremente.