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Cardenal Brenes: “Desde su pobreza todos van a dar y entregar su amor a la virgen”
Cada 7 de diciembre, Nicaragua conmemora la tradicional Gritería en todos los rincones del país.
El cardenal Leopoldo José Brenes, arzobispo de la Arquidiócesis de Managua, reconoció que las limitaciones económicas y sociales que vive el país, podrían provocar austeridad de los fieles católicos nicaragüenses, sin embargo, serán muchos altares los que celebrarán a la Inmaculada Concepción de María, mediante la tradicional Gritería hoy 7 de diciembre.
“Siempre está el pasaje bíblico de la viuda que da la monedita, lo único que tiene y lo da con amor, es bien hermoso como nuestra gente coloca los altares y uno se pone a pensar, esta gente como lo hizo, pero es que en medio de su pobreza van a dar mucho, habrá otras que serán más elegantes, pero es que lo importante es que manifestamos nuestro amor, nuestro cariño hacia la virgen”, dijo Brenes.
Según Brenes, es la Santísima Virgen y su hijo Jesús, los que siempre dan los medios para que los fieles devotos, desde sus limitaciones, pueda hacer partícipes a aquellas personas que quieran hacer una oración frente a la madre.
“Este 7 de diciembre es la gran peregrinación del pueblo cristiano, el pueblo católico alrededor de la madre, porque a partir de mediodía en algunas partes saldrán los grupos de peregrinos para visitar los hogares; y a partir de las 6 de la tarde, aquí en nuestra arquidiócesis y en otras partes del país también se unirán grupos de peregrinos para manifestar con ese grito de que María es de Nicaragua”, mencionó Brenes.
Monseñor Álvarez celebran 28 años de vida sacerdotal
El religioso habló de esta festividad mariana, al término de una santa misa que presidió en la Parroquia San Judas Tadeo, en Managua, en donde tres sacerdotes se reunieron para celebrar 28 años de vida sacerdotal.
Precisamente 28 años de vida sacerdotal, también cumple Monseñor Rolando Álvarez, obispo de la Diócesis de Matagalpa, que actualmente se encuentra en retención domiciliar policial y quien acostumbraba reunirse junto al resto de sacerdotes para celebrar.
“No solamente lo he felicitado, sino que he estado con él en esta semana, para manifestarle nuestra oración y nuestra cercanía de parte de toda la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN)”, señaló escuetamente el cardenal Brenes.
El padre Julio Arana, párroco de ese templo católico y vicario judicial, fue uno de los que conmemoró 28 años de vida sacerdotal, en los que reconoce ha sido vital el acompañamiento de los fieles católicos en momentos de soledad.
“Al momento que uno experimenta la soledad, uno logra superarla y lo logra cambiar, porque la familia es un pilar fundamental, mis padres, mis hermanos siempre están conmigo a pesar de ser el menor de mis hermanos, pero yo siempre soy un niño para ellos, ese pequeñito, están pendiente, eso te anima mucho, también hay momentos de tristeza, pero lo más importante es el pueblo de Dios que reza por nosotros en esos momentos”, agregó.
Junto a Arana conmemoraron también su 28 aniversario el padre Hans Bendixen, de la Parroquia San Luis Gonzaga; y el padre Aureliano O, down, de la Parroquia Cristo Agonizante del Rosario.
“Con ellos nos reencontramos hoy, desde que cumplimos 25 años en 2019 no nos mirábamos, elevamos hoy nuestra oración por estos 30 sacerdotes que cumplen también aniversario de ministerio sacerdotal”, refirió.
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