Referencial
Fiesta de los Agüizotes, una tradición en el corazón de los Masaya
Hoy se espera la llegada de centenares de nicaragüenses, que continúan con esta tradición.
Cada último viernes de octubre, pintorescos personajes que son parte de los mitos y leyendas tradicionales en Nicaragua se dan cita en las principales calles de Masaya para ser parte de la fiesta de los Agüizotes.
Aunque estos mitos y leyendas son de antaño, la procesión de los Agüizotes data según algunos historiadores desde mediados del siglo 20, específicamente en el año 1976, cuando se oficializó el recorrido que sale desde la Plaza de Magdalena en el barrio indígena de Monimbó.
Los Agüizotes que en la lengua Náhuatl significa “espanto cerca del agua”, es también una celebración popular enmarcada en las fiestas de San Jerónimo en Masaya, Patrono de esa Ciudad. Para los masayas, esta tradición es una herencia que ha pasado de generación en generación y que sigue siendo parte de la identidad de la ciudad de las Flores.
“Masaya está de fiesta, desde el día de ayer que celebramos La Vela del Candil por la noche, hoy en la mañana tuvimos Diana. Y en todo el día la gente de Monimbó anda atareada buscando sus trajes para ir a la fiesta, ya que la de los infantiles salen de la plaza Pedro Joaquín, y la general sale de la iglesia Magdalena”, expresó Marvin Suazo, director del grupo Agüizotes de Monimbó.
A raíz de las grandes multitudes que se dan cita para esta fiesta tradicional, se realizan “Los Agüizotes Infantiles” donde participan niños de 3 a 12 años y se realiza de 3 a 6 de tarde.
“Yo recuerdo que mi padre me inculcó esta tradición desde que tenía la edad de 4 años, desde esa fecha mantengo viva nuestra tradición, no tengo nada que envidiarles a otros países que celebran Halloween, hay que consumir lo nuestro, como lo son Los Agüizotes. Esto ha sido de generación en generación, mi abuelo se lo inculcó a mi papá, mi papá a mí y ahora yo lo hago con mis hijos”, comentó Freddie Suazo, tradicionalista.
“Invitamos a toda Nicaragua, para que disfrutemos de nuestras verdaderas fiestas, como lo son Los Agüizotes, porque realmente nos han querido vender ahora una fiesta que no es nicaragüense; sin embargo, los Agüizotes son nuestros y únicos en Centroamérica”, finalizó Marvin Suazo.
Hoy por hoy, los Agüizotes se mantienen vivos en el corazón de los masayas, detrás de cada máscara, baile y representación de los mitos y leyendas; este último viernes de octubre la tradición reunirá no solo a los tradicionalistas, sino también a otros que desde varios departamentos del país asisten año con año para ser parte de esta celebración.
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