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Industria del tabaco amenaza al medioambiente, dice OPS


El tabaco mata anualmente a 8 millones de personas en el mundo, es decir, a la mitad de los consumidores, sus efectos nocivos trascienden a la salud humana, pues los cultivos que impulsan las grandes industrias tabacaleras también amenazan los recursos naturales y los ecosistemas, asegura la Organización Panamericana de la Salud OPS/OMS.

Durante un webinar promovido recientemente por la OPS en el marco del Día Mundial Sin tabaco, en el que abordó este tema, el doctor Anselm Hennis, director del Departamento de Enfermedades no Transmisibles de dicha organización, mencionó que el impacto negativo de este cultivo es tal, que incluso pone en riesgo la seguridad alimentaria de los países.

“En nuestra región, Brasil y Cuba tienen problemas de desertificación atribuibles al cultivo del tabaco”, subrayó.

Hennis señaló que la industria tabacalera actualmente emplea eco blanqueo y se hace pasar por socialmente responsable para tratar de invisibilizar los impactos severos que tiene este rubro económico en el medio ambiente.

“Contribuye al cambio climático, ya que producen gases de efecto invernadero equivalentes a 84 megatoneladas de dióxido de carbono por año, además de la destrucción de 4 mil millones de hectáreas de tierra que se utilizan para cultivar el tabaco y también afecta la vida marina. El cultivo del tabaco agota los suelos, lo cual contribuye a los desafíos de seguridad alimentaria y contaminación”, afirmó.

En este sentido, Adriana Bacelar, especialista para vigilancia de tabaco OPS/OMS también explicó que, en todo el ciclo de vida del tabaco que empieza desde el cultivo de las hojas, hasta el desecho de los productos después de consumidos, se generan problemas ambientales.

“En su cultivo, los problemas están relacionados con el uso del agua, tierra, el uso de plaguicidas y la deforestación. En la siguiente etapa, que es el curado del tabaco, el impacto es la contribución para la deforestación y la retención de madera para curar la hoja de tabaco; tanto en la fabricación como en el transporte y distribución de los productos, son generados gases de efecto invernadero que se emiten a la atmosfera y también residuos de fabricación”, señaló.

Comentó que, en el consumo, los residuos tóxicos del humo de tabaco son liberados en el ambiente y muchos de estos residuos persiste ahí por un largo periodo.

“En el post consumo tenemos las colillas que son altamente contaminantes, tenemos los desechos de los paquetes que son el plástico y el cartón y el humo residual que contamina el medio ambiente”, dijo.

La OMS ha recomendado a los países que son parte del Convenio Marco Contra el Tabaco (CMCT), avanzar con la aplicación del mismo que incluye abogar por los ambientes 100% libres de tabaco y emisiones, responsabilizar a la industria del tabaco por los costos de la limpieza de los residuos de sus productos, la aplicación de impuestos adicionales a la industria para proteger el medioambiente, e impulsar a los cultivadores a que adopten medios de vida alternativos y sostenibles.

Este CMCT de la OMS, fue adoptado por unanimidad por la 56ª Asamblea Mundial de la Salud de 21 de mayo del 2003, y se convirtió en el primer paso en la lucha mundial contra la epidemia de tabaquismo y sus efectos nocivos.