FOTO: WALKIRIA CHAVARRÍA | VOS TV

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Mujeres indígenas de Centroamérica decididas a recuperar sus tierras


La batalla en común que comparten las mujeres indígenas en Centroamérica se resume en una sola: recuperar el derecho sobre sus tierras ancestrales que les han sido arrebatadas por la codicia y abuso de grupos económicos que se han apoderado de sus territorios, la mayoría amparados por los gobiernos.

Por casi 20 años varios grupos de pueblos indígenas originarios de Costa Rica de los territorios Broran, Cabagra, Salitre, Casona y China Kichá han reclamado a los distintos gobiernos de su país la devolución de sus territorios que han sido invadidos o expropiados para la ganadería y el cultivo expansivo de actividades que han hecho más vulnerables a los efectos del cambio climático.

“Para palear este cambio climático que nosotros como indígenas ya lo estamos viendo en nuestros territorios y nuestras comunidades por diferentes motivos, hemos decidido recuperar nuestras tierras totalmente”, afirmó Mariana Delgado Morales de la comunidad indígena de Salitre en Puntarenas Costa Rica.

Mariana Delgado Morales de la comunidad indígena de Salitre en Puntarenas Costa Rica.

Delgado relata que en la actualidad las fincas que han recuperado en Salitre apenas son 41, "quedando comunidades completas sin recuperación. Creemos que resistiendo, luchando y defendiendo nuestros territorios y nuestras tierras, porque de ella depende la vida de nosotros como indígenas, también contribuye a la protección del ambiente para que todo el planeta pueda tener un oxígeno limpio".

Más al sur de la región, Dionilda Gil, del territorio indígena de Emberá en Panamá, relata que las comunidades indígenas de Ngöbe, Buglé, Wounaan y Emberá, Naso y Bribri en Panamá también luchan para que el gobierno les reconozca el derecho territorial que tienen sobre sus tierras ancestrales, ubicadas en las reservas naturales del parque Nacional Chagres y el lago Gatún, cuyas aguas regulan el funcionamiento del Canal de Panamá.

La progresiva inversión de terceros en estas comunidades indígenas de Panamá han sustituido grandes áreas de bosques para construir una represa hidroeléctrica, acaparando muchos de esos territorios para la explotación minera.

"Somos guardianes de nuestros bosques, protegemos nuestra naturaleza, hacemos que nuestros ríos se mantengan, porque no somos de talar. Todo grupo originario siempre salvaguarda los bosques, pero a nosotros nos quieren privatizar, no podemos hacer casas, no podemos talar árboles para beneficio propio, no para ventas ni exportar, sino para uso propio, son cositas que a veces el Estado nos limita", comentó.

Recuperar sus tierras se ha convertido de una batalla de todos los días para los pueblos indígenas de Centroamérica, donde las mujeres han liderado estas luchas solas, excluidas de los grupos de tomadores de decisiones.

Los asesinatos de indígenas por la recuperación de sus tierras, la represión y persecución en contra de estos pueblos originarios es una constante a lo largo de las comunidades étnicas asentadas en el istmo centroamericano, pero esta realidad no los ha hecho desistir de su objetivo.