Foto Salvador García / VOS TV

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Gas licuado de 25 libras llega a 359 córdobas tras quinta alza consecutiva, según el Indec

Esta semana tuvo un aumento de 9 córdobas.


Esta semana el gas licuado registró un alza de 9 córdobas en el cilindro de 25 libras, el más utilizado por los nicaragüenses, con lo que completa su quinta alza consecutiva, según el Instituto de Defensa al Consumidor (Indec).

Según datos del Indec, el cilindro de 25 libras en enero de este año costaba 301.35 córdobas y ahora se cotiza en 359, el de 10 libras a principios de año costaba 126.25 córdobas y ahora se encuentra a 149 córdobas; mientras el cilindro de 100 libras pasó de costar 1,358 córdobas a cotizarse a 1,650 córdobas.

Gustavo Ortega, subdirector del Indec, manifestó que han recibido denuncias esta semana que en algunos lugares se está cobrando hasta 370 córdobas por el cilindro de 25 libras, como si le agregará "de facto" el transporte del centro de distribución al hogar.

“No hay un cobro extra por cambiar su cilindro, si usted llega hoy con un tanque de 10 libras a comprar uno de 25, no te pueden cobrar un extra por eso, deben cobrar el precio ya establecido, además tampoco hay ningún costo extra si lleva una marca y quiere de otra, si usted manda un amarillo y necesita un verde, eso es lo que le deben mandar sin costo”, dijo Ortega.

El Indec advirtió que el incremento de este producto causa un efecto dominó en los demás productos de la canasta básica, además que afecta a comerciantes de alimentos preparados.

“Lógicamente al subir el gas licuado de petróleo, pues por ejemplo, las tortillas tendrán que subir de precio o hacerla más pequeñas, cuando vas a una comidería vas a notar que hasta menos comida ahora te darán, en las tortillerías compran tanques de 25 libras para mejorar el tema de la producción y tienden a reducir el tamaño ahora para pagarlo”, expresó Ortega.

Esta afirmación del Indec se ve reflejada en las distribuidoras del cilindro de gas, como la de Aráis Martínez, ubicada en el Mercado Oriental, en donde son menos comerciantes los que compran este producto porque ahora prefieren usar leña y carbón para preparar alimentos.

“Hay negocios que cerraron, ya la gente dejó sus tramos y se fue y ellos eran clientes fijos, eso por supuesto aminora mis ganancias y no hay semana que no suba cada cilindro”, enfatizó Martínez.