Cortesía

Cortesía

Congelar precios de los combustibles es insuficiente, dice la CGC

Insiste en la necesidad de una reforma a la Ley de Hidrocarburos para recortar la aplicación de impuestos que tienen los combustibles.


El congelamiento que ha mantenido el Gobierno de Nicaragua por 12 semanas consecutivas a los precios de los combustibles y sus derivados es una medida no ha logrado frenar la crisis inflacionaria del costo de la vida en Nicaragua, asegura Rubén Arriola, director de la Consultoría de Gestor al Consumidor (CGC).

En los últimos 3 meses, las autoridades nicaragüenses han aplicado esta medida como paliativa frente al alza internacional que sufren los precios del petróleo como efecto de la invasión de Rusia a Ucrania, sin embargo, esto no ha impedido que la canasta básica siga al alza.

Al respecto, Arriola insiste en este tipo de medidas, no necesariamente va a la raíz del problema y ve la necesidad de una reforma a la Ley de Hidrocarburos para recortar la aplicación de impuestos que tienen los combustibles, lo que ayudaría a aliviar el bolsillo de los nicaragüenses.

Sugiere que “de los 4 impuestos que tienen los hidrocarburos, eliminarle 2, por lo menos eliminar el impuesto selectivo de consumo, el impuesto sobre venta ayudaría un poco y dejar los otros 2 impuestos que son necesarios, que es el impuesto al fomento vial y el otro impuesto de importación”.

Otra media que sugiere al Gobierno esta organización para hacerle frente a la carestía de la vida, es revisar la política de recaudación fiscal, que se endureció desde 2019 con la aprobación de la reforma a la Ley de Concertación Tributaria.

“Hay otros insumos que no se están tomando en cuenta y están grabados con impuestos: los insecticidas, la urea, los abonos, los e implementos de trabajo como los machetes, aquí no los hacemos y están grabados con impuestos, botas de hule”, dijo.

Recordó que otra propuesta presentada hace varis meses por la CGC al Ministerio de Fomento, Industria y Comercio (Mific) es que se desgraven aquellos productos de la canasta básica que son importados, como por ejemplo los detergentes, jabones de lavar y de baño, papel higiénico, cepillos y pasta dental, sopas instantáneas, sin embargo, esta petición no ha encontrado eco en las autoridades.

“Esto bajaría el precio de la canasta básica entre un 30 a un 45%”, asegura Arriola.

A la CGC le preocupa la reciente deuda que el Estado de Nicaragua adquirió a través de un préstamo con el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) por el orden de más de 200 millones de dólares para financiar
el Programa Temporal de Apoyo Ante la Crisis de los Combustibles en Nicaragua.

A juicio de Arriola, medidas como estas no abonan a una recuperación económica del país de la actual crisis, sino que la profundizan más.

“De que nos sirve que el Estado se esté comprometiendo con fondos que le está otorgando el BCIE, ya es el segundo préstamo, una duda externa que se está adquiriendo, ya no son US$200 millones, son más de US$400 millones que el Estado en su momento los va a tener que asumir y los va a tener que pagar (…) El Estado se está endeudado y nos están endeudando a todos los nicaragüenses”, lamentó.