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Managua, un territorio hostil para personas con discapacidad
Personas con discapacidad buscan independencia en su movilización.
Jael Monge González, cada mañana toma la ruta 102. Su destino es la Organización de Ciegos de Nicaragua, Maricela Toledo, en donde labora. Sus obstáculos en la capital son muchos, incluido el más cercano a su centro de trabajo, se trata del Parque Las Madres, ubicado a un costado de la Rotonda El Guegüense, en donde han pedido a través de misivas líneas táctiles pódales.
Para poder cruzar el parque, Jael quien es ciega, ha tenido que solicitar ayuda a los vigilantes del lugar en reiteradas ocasiones y cuando no la pide ha ido a parar hasta los juegos infatiles del lugar.
"Esas líneas se ponen como alto relieve en el piso, que hay que aclarar, no causa ningún cambio en el diseño del parque, para que nosotros los ciegos totales y los de baja visión vayamos tocando con nuestro bastón y con nuestro pie el relieve y caminar de forma independiente", explica Jael.
Para Jael no existe en Managua un sitio en donde en su totalidad se logre la independencia de desplazamiento, pese a esfuerzos del sector privado y gubernamental.
"En la mayoría de los parques no hay líneas táctiles podales, eso hace que nosotras las personas ciegas estemos limitas a ir de forma independiente estos lugares, siempre tenemos que ir con un acompañante o alguien que nos asista para poder desplazarnos o cruzar una calle", indica.
Jael reconoce que muchas empresas, instituciones públicas y sitios de entretenimiento poseen rampas en el ingreso, para personas ciegas, en silla de ruedas o con alguna otra discapacidad físico motora, pero la mayoría de veces son obstaculizadas.
"A veces están ocupadas por vehículos, por motocicleta, por vendedores y estamos conscientes que tienen derecho al trabajo, pero muchas veces se coloca en la entrada de los parques, en las rampas, en las paradas de buses; y eso nos obliga a caminar por la calle y no por la acera y sabemos que estamos propensos a sufrir un accidente", remarca Jael.
En silla de ruedas el obstáculo es peor
La situación de Juan Pío Ortiz, es más complicada, porque utiliza para movilizarse una silla de ruedas, que no haya aceras seguras, le hace vulnerable y debe gastar más dinero al salir, por la falta de Transporte Urbano Colectivo (TUC) que le asista.
Pío rememoró que en el 2010 se trajeron a Managua los primeros buses marca Dina, que tenían rampas para subir a personas en silla de ruedas, pero tras los ensayos realizados en la práctica no se utilizaron.
"A pesar de la buena voluntad del Gobierno y la municipalidad, el servicio está a mano de la cooperativa y de los socios, ellos determinaron que tenía también que cumplir el pago a las unidades, por el cual en la frecuencia de pase que se había determinado no se cumplió", refiere.
Pero Jael, quien a pesar de su discapacidad visual si utiliza el TUC, señala que incluso los asientos de primera fila que deberían ser para las personas con discapacidad a veces los ocupa cualquiera.
"Y no los ceden, pasa más con los varones, se hacen los que van hablando de Managua entre sí y diciendo 'mira aquí es tal parte, bonito verdad', para esta manera hacerse los distraídos", agrega.
Normas de accesibilidad se cumplen a medias
Mientras tanto, en las aceras, hay falta de rampas de conectividad de un andén a otro, como lo exigen las Normas técnicas obligatorias nicaragüenses de accesibilidad.
Juan Pío, pasa por esta situación en reiterados sitios de Managua y uno de los transitados a diario es cerca la Rotonda El Guegüense.
Pío a diario viaja del Reparto Shick a Bolonia, donde se ubican distintas organizaciones defensoras de las personas con discapacidad.
"No existen rampas de conectividad de andén a andén y se necesitan más lo que le llamamos barras o líneas de cebra, que es el pase peatonal para darle seguridad a la persona con discapacidad y cualquier persona", enfatiza Pío.
La opción es rodar en la silla de ruedas por la calle, ante la necesidad de transitar por Managua, pero en reiteradas ocasiones ha sufrido accidentes, al ser atropellado por vehículos.
Se capacitan para el uso del bastón blanco
El Centro de Formación Cultural para Personas Ciegas (C.F.E.C.), entrenan a las personas con discapacidad visual, para aprender a ser independientes pese a las duras circunstancias que impone la ciudad.
Alicia Palacios, directora de este centro, detalla que no todas las personas son ciegas de nacimiento, por ello requieren de un entrenamiento que les permita aprender a utilizar el bastón blanco, a como le llaman al instrumento para movilizarse.
"La persona que pierde la vista porque tuvo una enfermedad o accidente, se enfrenta a un nuevo mundo, mientras que la persona que ya nació ciego tiene un poco más desarrollado el oído, el olfato y el tacto, claro que la persona que quedó ciega por cualquier situación se le hace más fácil una dirección por ejemplo, pero igual reinicia un mundo", dijo Palacios.
Xavier Soza, instructor del C.F.E.C, aclara que la idea de utilizar el bastón blanco es permitirle la posibilidad de independencia al ciego al transitar por las calles, pero hay parámetros que cumplir en la posición para tomarlo y moverlo sin convertirse en un riesgo propio para uno mismo o el resto de transeúntes.
"Cuando nos encontramos obstáculos que no conocemos hay que acercarse al objeto y rodearlo con el bastón, para darse cuenta de qué tipo de obstáculo estamos tocando; el bastón nos va a orientar si tenemos que ir de frente o movernos a un lado para evitar el obstáculo", manifiesta Soza.
El llamado de Soza, quien también es ciego, es a los nicaragüenses a aprender también como ayudar a cruzar una calle a una persona ciega, puesto que hay malas prácticas que más bien le ponen en riesgo.
Algunos van empujando al ciego al cruzar la calle, tampoco es recomendable para el ciego agarrarse del hombro porque se puede resbalar, es mejor tomarse de un brazo", establece.
Grabar rutas en su memoria
Según el instructor del C.F.E.C es importante que grabe en su memoria la cantidad de pasos o de cuadras que debe dar de un lugar a otro, para poder lograr una mínima independencia.
"En la parada del bus está lleno de negocios y eso dificulta el paso, en algunos lugares hay tantos obstáculos en la acera, que tienes que ir bajando a la calle y subir una y otra vez, en otros sitios no hay ni acera y toca sobre la carretera en su totalidad, todo eso tienes que explicarle al alumno, para que se vaya grabando los recorridos y así también tratar de capear los obstáculos", explica Soza.
Esto dice la Ley 763
La Ley 763, Ley de los Derechos de las Personas con Discapacidad, posee su propio reglamento, que enumera las condiciones para cumplir con la accesibilidad para personas con discapacidad y según el abogado Noel Alonso Cano, experto en derecho penal, atañe a las autoridades municipales, ministerios y empresas privadas.
"Para que garantice el acceso a las personas con discapacidad; contempla el acceso por elevadores diseñado específicamente para personas que tienen esas facultades y también una serie de ámbitos educativos, sociales, incluso de acceso a la justicia en materia de estado civil de las personas, que tienden a establecer al funcionario correspondiente cuál es la actuación que debe asumir para facilitar el acceso a los servicios públicos y privados a las personas con discapacidad", revela.
Según el abogado, el reglamento establece incluso el procedimiento, para que las personas pida en cualquier sitio que lo amerite ese derecho al acceso a personas con discapacidad.
"Manda incluso a nombrar un funcionario encargado, que hagan de una forma concreta y directa realidad los derechos que están establecidos en la ley, en teoría debería haber en cada municipalidad, en cada ministerio, un apartamento o encargado de supervisar y de asegurar que esos derechos de las personas con discapacidad sea una realidad", añade.
Piden mantenimiento y reconstrucción de rampas existentes
Mientras tanto, la Asociación de Personas con Discapacidad Físico Motora, la que dirige Juan Pío Ortiz, insiste a la Alcaldía de Managua la revisión, reconstrucción y mantenimiento de las rampas.
"Un llamado a la alcaldía para que retomé la buena voluntad del gobierno en el 2015, quien pidió el desarrollo de 1,700 rampas a nivel nacional, en las cuales a Managua se distribuyeron 750 y las hicieron, ahora pedimos en proyectos de obras menores incluya la rehabilitación de las rampas, porque requieren de mantenimiento y de la pintura con el símbolo Internacional de la discapacidad", específica.
Incluso el llamado es a cumplir a cabalidad con las normas técnicas, puesto que algunas rampas no cumple el tamaño correspondiente, según Juan Pío.
"La rampa tiene una medida de una pendiente del 8% al 10% máximo; y cuándo es una rampa extendida tiene que tener cada 6 metros un descanso y para que la pendiente sea suave, esta rampa tiene un espacio de 1.5 de ancho, si no se cumplen bien las medidas más bien sería un riesgo", finaliza.
Jael, Juan Pío, Javier y todos los que viven con una discapacidad, afirman que tienen derecho a lograr la independencia de trasladarse de un sitio a otro en la capital, no es solo un asunto legal, es por asunto de humanidad.
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