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Acusación a docente de la UNA podría afectar a quienes postearon video, dice experto

Quienes grabaron el video primero debían llamar a las autoridades policiales y universitarias, para prevenir el delito y no incentivarlo.


Aunque Henry Alberto Duarte Canales, docente de la Universidad Nacional Agraria (UNA) fue despedido por presunto abuso sexual en perjuicio de una estudiante, todavía cabe una investigación en su contra a nivel penal que podría incluso determinar responsabilidades en quienes grabaron el video que lo acusa y que fue colgado en el Facebook, según Domingo Diogo, abogado experto en derecho penal.

El despido fue confirmado por Alberto Siles, rector de esta alma mater a Radio La Primerísima, sin detallar si se le acusará por la vía penal para que se establezca una investigación en su contra.

El video que circuló en las redes desde el pasado sábado 17 de junio, muestra a una estudiante saliendo de la oficina llorando y posteriormente se ve al docente también saliendo abotonando su camisa.

La persona que grabó el video le interroga varias veces: “¿Qué le hizo profesor? Salió llorando”.

El abogado especificó que, si se confirma el delito de abuso sexual o violación de parte del docente, se podría también investigar a quienes grabaron el video que se subió a redes sociales, porque si de previo tenían conocimiento que en ese sitio se cometería el ilícito estarían implicados como presuntos cooperadores necesarios o cómplices, según el Código Penal.

“Si yo voy a sabiendas de que hay un delito que se va a consumar y voy filmando, hay una responsabilidad que se puede adicionar en contra de esa persona, no digo que hay que hacerlo, pero un análisis teórico jurídico nos dice que nosotros los seres humanos tenemos la potestad y la capacidad, sobre todo la obligación de denunciar hechos y de prevenir delitos, no de filmarlos”, dijo Diogo.

Lo que debían hacer

De tener denuncias en contra de este docente, quienes grabaron el video primero debían llamar a las autoridades policiales y universitarias, para prevenir el delito y no incentivarlo.

“Qué les costaba agarrar el teléfono, llamar al distrito policial que corresponda y llamar al número de emergencia, y decir en tal aula de tal universidad va a pasar eso, porque tenemos conocimiento de algunas denuncias, hemos tenido comentarios y nosotros queremos que ustedes lo eviten y si no está la policía al menos que el agente de seguridad de la universidad y las autoridades académicas de la universidad presenten”, añadió.

Se prohíbe relaciones amorosas docentes-alumnos

Aunque aún no se sabe si este fue el caso, el reglamento interno universitario, considera graves comportamientos cuando se obligue a los estudiantes a otorgar favores sexuales a cambio de mejorar calificaciones.

“Inclusive la universidad prohíbe que el profesor o la profesora tengan relaciones de pareja con alumnos, eso siempre conlleva una responsabilidad administrativa, cuanto y más si se trata de un abuso de autoridad y sexual, ya es un delito penal”, añadió el abogado.

Despido debe ir acompañado de investigación judicial

Vanessa Castro, experta en temas educativos, consideró que el despido debe ir acompañado de una investigación, porque de ser ciertas las acusaciones de abuso sexual, seguiría en otro centro superior cometiendo este delito.

“Donde llegue, porque eso es lo que está en su mente y en sus emociones, pensará que tiene derecho a hacer lo que quiera, ´porque yo soy un macho y todos estos que están en esta clase o todas estas son personas están bajo mi mando y puedo hacer lo que quiero´, por eso es mejor investigar, no permitir abuso”, expresó Castro.

De confirmarse que los hechos sucedieron con el consentimiento de la víctima, no hay delito que perseguir siempre y cuando no sea menor de 18 años.

De momento se desconoce si las autoridades policiales y universitarias han iniciado alguna investigación del caso, para llevarle ante un proceso judicial.

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